Segovia no es una provincia en la que haya muchas ofertas de trabajo, según se desprende del informe ‘Infoempleo’, elaborado por la empresa de recursos humanos Adecco, en el que se analiza el mercado laboral de 2014.
El estudio refleja que el año pasado la participación de las ofertas de empleo en Castilla y León retrocedió en comparación con 2013, pasando de 7.076 a 6.682, lo que supone 0,6 puntos porcentuales. De estas ofertas, solo el 7,96 por ciento pertenecían a la provincia de Segovia, una de las cuatro que menos oportunidades laborales ofrece, solo por delante de Zamora —con el 7,84 por ciento de las ofertas regionales—, Soria —que tiene el 7,17 por ciento— y Ávila —la que menos oportunidades recoge, con el 6,85 por ciento—. Con sus 532 ofertas en 2014, Segovia se situó, asimismo, en el puesto 43 del ranking nacional.
Valladolid es la provincia que mayor número de ofertas de empleo presentaba en 2014, con casi un 20 por ciento, a la que sigue muy de cerca Burgos, con el 18,48 por ciento. A continuación están León, con el 12,78 por ciento de las oportunidades laborales que hay en la región; Salamanca, con el 10,98 por ciento; y Palencia, con el 8,70 por ciento.
En cuanto a los sectores en los que más trabajadores se demandan, destacan otras actividades de Servicios y el Comercio minorista, con el 19,7 y el 19,3 por ciento de las ofertas de empleo, respectivamente. Asimismo, los puestos de trabajo que reciben más ofertas de empleo son el de comercial, con el 28,9 por ciento, y el de asesor/promotor, con el 8,03 por ciento.
Para titulados universitarios, las ofertas son más escasas, destacando las de ADE, con un 2,85 por ciento, y las de Ingeniería Industrial, con un 2,42 por ciento.
Demandantes
Por lo que respecta a este año, cabe resaltar que el número de demandantes de empleo en Castilla y León en junio fue de 246.546, lo que supone un 10,44 por ciento menos que en el mismo mes del año anterior, que se situó en 275.302, según los datos del Ministerio de Empleo y Seguridad Social.
Del total de demandantes, 30.586 eran peronas ocupadas; 11.222 tenían disponibilidad limitada; 193.004 estaban en situación de desempleo y estaban registrados como tales; y 11.734 eran “otros no ocupados considerados parados por la EPA”.
