Los nuevos responsables de la sociedad Segovia 21 han decidido prescindir del que fuera su director administrativo y de explotación casi desde su puesta en marcha, Jesús Sánchez Díez.
El directivo recibió ayer la carta de despido en la que le comunicaban que prescindían de sus servicios y para ello alegaban causas objetivas económicas “por el interés de la empresa”. Se trata de una de las razones que contempla la legislación actual para extinguir un contrato laboral y que persigue “contribuir a la superación de una situación económica negativa”.
Jesús Sánchez se hizo cargo de la Dirección de Segovia 21 en enero del año 2006 por encargo de los entonces responsables de la sociedad. Su vinculación con la empresa se hizo a través de un contrato laboral común. Sánchez Díez ha sido una de las principales caras visibles de este complejo que pusieron en marcha en su día la Diputación provincial, la Cámara de Comercio y Caja Segovia. Para ello se permutaron y recalificaron terrenos situados en la finca Quitapesares, donde se ha construido el campo de Golf La Faisanera, un parque empresarial con vivero de empresas, y comenzaron a levantarse algunas viviendas y un hotel, cuyas obras se encuentran actualmente paralizadas, tras la crisis económica.
Además de confirmar la noticia, el propio afectado, Jesús Sánchez, ha anunciado que tiene intención de recurrir su despido ante la autoridad laboral, pues considera que su trabajo ha sido de “absoluta lealtad a los intereses de la empresa” durante todo este tiempo, tal como se lo han reconocido en varias ocasiones. Jesús Sánchez, que no ocultó sentirse defraudado con los nuevos administradores de Segovia 21, fue miembro del Consejo de Administración que quedó disuelto el pasado 18 de septiembre. Entonces se decidió prescindir de todo el órgano colegiado y modificar su modelo organizativo. Todo el Consejo quedó disuelto, como también se eliminó el cargo de consejero delegado, que ocupaba Atilano Soto, al frente de esta sociedad desde octubre de 2003.
El año pasado se decidió que un administrador único dirigiría la empresa: la sociedad Verae, capitaneada por Javier de la Orden y David López, en la vertiente jurídica; y Adolfo López, en la económica y financiera, que son quienes llevan la gestión integral del complejo.
