La duda ofende. Es lo que han pensado los médicos y enfermeras de Segovia cuando han leído la instrucción del director general de Salud Pública, Agustín Álvarez Nogal, en la que pide que no utilicen el traje antiébola como disfraz en la fiesta de Halloween. La recomendación a modo de prohibición ha generado malestar entre el personal sanitario que, cuando menos, la califica como inapropiada, torpe y ofensiva.
En un escrito remitido al gerente de Salud de Segovia, Agustín Álvarez Nogal indica que ante la próxima celebración de la “importada” festividad de Halloween y “en previsión de que los Equipos de Protección Individual frente al virus Ébola pudieran ser utilizados en ella, te pido que articules los medios que consideres en el ámbito de tu Gerencia para evitar el uso inapropiado de los EPI, especialmente tratándose de recursos para los que en estos momentos existen problemas de abastecimiento por parte del distribuidor”. La carta, que también se envió a otras gerencias de área, fue remitida después a los coordinadores de los centros sanitarios y rebotada el miércoles a los profesionales, entre los que ha causado una sorpresa negativa. “Esa instrucción sobra a todas luces”, asegura el presidente del Colegio de Médicos, Enrique Guilabert, asegurando que “a ningún médico se le pasa por la cabeza utilizar ese material público de protección para salir por la calle de fiesta”. Guilabert entiende que el director general de Salud Pública “se ha equivocado” con un comunicado “inapropiado” que “no tiene sentido”, y espera que no se confunda el “uso responsable” que hacen los médicos del equipo antiébola con los trajes de imitación que se han convertido en el disfraz de moda para Halloween.
Más dura ha sido la reacción de la secretaria provincial del Sindicato de Enfermería Satse, Sara Matesanz, para quien las palabras de Álvarez Nogal muestran falta de respeto a los sanitarios y su mensaje es “indignante” y “ofensivo”.
“Los profesionales de la Sanidad no somos payasos ni niños que jugamos a disfrazarnos, o ¿es lo que piensa que hacemos cada vez que nos ponemos el pijama de enfermeras en nuestro trabajo?”, dice Sara Matesanz para añadir que “este señor debe pensar que jugamos con los maletines y nos llevamos las camillas a casa para darnos masajes”. Para Sara Matesanz el “sorprendente” mensaje del director de Salud Pública también evidencia desconocimiento sobre las características del equipo protección ante el virus del ébola. “¡Pero cómo te vas a llevar a una fiesta un traje con que en pocos minutos ya estás sudando!”