Licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad Complutense de Madrid y Doctorado en Medicina por la Universidad Autónoma de Madrid, Pedro Iglesias es especialista en Endocrinología y Nutrición en el servicio de Endocrinología y Nutrición del Hospital Universitario La Paz de Madrid. Actualmente es médico adjunto del Servicio de Endocrinología y Nutrición del Hospital Universitario Ramón y Cajal de Madrid.
Usted ha sido premiado por un artículo escrito -en coautoría con otros ocho profesionales- sobre el Hipogonadismo en hombres de avanzada edad. ¿Podría explicar brevemente en qué consiste el trabajo premiado?
Se trata de un estudio observacional y descriptivo que trata de averiguar, por un lado, la prevalencia del hipogonadismo -es decir, niveles bajos de testosterona sérica en el varón anciano hospitalizado por una enfermedad aguda y, por otro, su asociación con el resultado del ingreso hospitalario. Es la primera vez que se analiza con detalle la importancia del hipogonadismo en este grupo de población. Como principales hallazgos encontramos que, aproximadamente, la mitad de los pacientes presentaban hipogonadismo y éste se asociaba a una mayor mortalidad hospitalaria. Esto sugiere que los niveles bajos de testosterona en suero se pueden considerar como un marcador de supervivencia al ingreso hospitalario por un proceso agudo en el varón anciano.
Para quien no haya oído hablar nunca sobre el hipogonadismo, ¿a qué tipo de personas suele afectar y cómo se presenta?
El hipogonadismo se define como la presencia de niveles de hormonas sexuales por debajo del límite inferior a la normalidad. En el caso que nos ocupa y, al tratarse de varones, se refiere a niveles bajos de testosterona sérica. La testosterona sérica disminuye con la edad en el varón, y se ha descrito una prevalencia que oscila entre el 6% y el 9,5% de los varones con edades comprendidas entre 40 y 70 años. Esta prevalencia puede aumentar al 15-30% en varones diabéticos y obesos. Las causas son múltiples, pero algunas enfermedades agudas y crónicas pueden ser factores de riesgo a la hora de desarrollar un hipogonadismo en el anciano.
Cuando se investiga sobre un trastorno como éste, ¿qué problemas principales se plantean?
En nuestro caso, la detección de un hipogonadismo durante el ingreso hospitalario nos plantea la duda de si se debe a un proceso permanente ?en cuyo caso habría que plantearse un tratamiento hormonal sustitutivo con testosterona? o si pudiera tratarse de un problema transitorio asociado a un proceso agudo intercurrente o bien asociado a la edad de los pacientes estudiados.
¿Qué nivel de preocupación y concienciación existe en esta sociedad sobre la investigación en trastornos como éste?
En los últimos años se están llevando a cabo múltiples estudios para conocer el nivel óptimo de testosterona sérica en el anciano y saber si realmente es beneficioso o no el tratamiento hormonal sustitutivo con testosterona en el hipogonadismo asociado a la edad en el varón.
