Algunos policías locales han sido vacunados con el lote número ABV5300 de AstraZeneca que la Consejería de Sanidad retiró al estar relacionado con posibles efectos adversos graves en Austria y Dinamarca. Fuentes que conocen de primera mano esta situación relatan a este periódico como muchos de los policías locales que se vacunaron durante el jueves pasado, alrededor del 20% del total, han recibido una dosis de este lote.
De momento los agentes, del cuerpo de la capital y Cuéllar, no han tenido mayores síntomas que los relacionados con la propia vacuna de AstraZeneca (dolores de cabeza, fiebre, dolor muscular, cansancio) sin que se hayan dado ningún caso de coágulos o trombos, razón por la cual fue retirado el lote de forma preventiva.
Algunas fuentes revelan que los policías locales se encuentran preocupados a tenor de las últimas informaciones, un “mosqueo” que esperan quede en “nada” y no presente “futuros problemas”.
Estas mismas fuentes señalan que los agentes se muestran molestos con las administraciones ya que sospechan que en el momento de inocularles la primera dosis el jueves ya “se había alertado sobre ese lote”, además del silencio que se ha mantenido por parte de la Junta ante la pregunta de si se había llegado a administrar dosis del lote ante la confirmación de que había llegado a Segovia. Precisamente preguntado por las dosis del lote puestas en Segovia, el delegado territorial de la Junta señalaba este lunes por la mañana que no disponía de datos.
Como las malas noticias nunca vienen solas, los últimos informes que establecieron una posible relación entre la vacuna de AstraZeneca y casos de trombosis obligaron ayer al Gobierno de España a suspender de forma cautelar la utilización de esta variante.
De esta forma, se espera que la campaña desarrollada en la provincia se tenga que actualizar para solventar esta inclemencia, al punto de que esta suspensión reducirá las dosis disponibles y es muy probable que retrase el ritmo de la campaña.
Antes de conocerse esta noticia, el delegado de la Junta y la alcaldesa de Segovia, Clara Luquero, se acercaron este lunes al Pabellón Pedro Delgado para mostrar su apoyo a la campaña de vacunación, en un día que se empezó a administrar la vacuna entre los bomberos. También se anunció que la Policía Local terminaría hoy con la administración de la primera dosis, algo que no va a ser posible dada la suspensión del uso de la vacuna de AstraZeneca, profiláctico usado tanto entre bomberos como para cuerpos policiales.
Antes de conocerse la suspensión, se anunció que los bomberos se vacunarían en días no contiguos divididos en tres grupos para evitar que se concentren posibles bajas, un calendario ahora pendiente de revisión. En total, se prevé vacunar a 36 profesionales de este colectivo.
Mismas dudas se dan entre el último grupo de policías locales y el segundo de personal educativo, que hoy deberían recibir su primera dosis de AstraZeneca. Es posible que no afecte a otros grupos que están siendo vacunados con Moderna o Pfizer, entre ellos los funcionarios de prisiones que terminarán esta semana después de los problemas con los listados que alargaron el proceso, o la campaña entre mayores de 80 que ya ha iniciado la puesta de la segunda dosis.
Sobre este último grupo, Mazarías quiso concretar que está previsto que esta semana se empiece a vacunar a los mayores de 80 de las mutuas Isfas y Muface (620 personas) tras solventarse el viernes pasado los problemas con las migraciones de los datos.
Por su parte, Luquero se mostró contenta ante el avance de la campaña y recordó que “este proceso de vacunación es la esperanza de todos”. “Hemos querido acompañar a la Policía Local y a los bomberos que avanzando en ese protocolo de vacunaciones les correspondía hoy”, señaló la alcaldesa que indicó su deseo de que la vacuna llegue pronto a los más mayores.
Luquero mostró su esperanza ante la posibilidad de que al inicio del otoño pueda haber un 60% de la población vacunada y poder empezar a derrotar a un virus que tal y como la alcaldesa recordó ya lleva un año “entre nosotros”.
