La población activa de Segovia cuenta con una irregular distribución en la que los empleados públicos y los pensionistas suponen el 43 por ciento del total. Esto representa que por cada diez trabajadores privados hay cinco personas que reciben algún tipo de prestación y dos empleados públicos, que también son pagados por la Administración. En términos globales hay 34.000 pensionistas, 12.000 empleados públicos y 60.000 trabajadores privados.
Recientemente se hicieron públicos los datos de empleados públicos de las diferentes administraciones, y Segovia figura entre las que ha disminuido el número absoluto de funcionarios o personal laboral al servicio de la Administración. Sin embargo, los datos revelan que la proporción sobre el número de trabajadores particulares continúa siendo muy relevante.
En el caso de Segovia se añade además la circunstancia de que al tratarse de una provincia muy envejecida, existe una parte importante de población que recibe algún tipo de prestación por jubilación o incapacidad.
Los últimos datos de la Seguridad Social determinan que en Segovia existen 11.899 empleados públicos. La mayoría de ellos, 6.285 pertenece a la Comunidad de Castilla y León. A las distintas entidades de la Administración local (ayuntamientos, Diputación, mancomunidades, etc.) están adscritas 3.132 personas. Y el resto, 2.482 son de la Administración General del Estado.
Además hay que añadir los 284 hombres y mujeres que están vinculados a las universidades. De ellas 189 son personal laboral, y 49 son funcionarios de carrera. Hay 44 que son de administración y servicios, tanto funcionarios como personal laboral.
Dentro de los funcionarios que dependen del Estado, en Segovia existe una mayoría que pertenece a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado: en total 1.352. A la Administración de Justicia están adscritos 206. Y los 924 restantes son de personal dependiente de los distintos ministerios.
SECTORES
Dentro de los trabajadores privados en Segovia destacan los más de 2.600 que se dedican a trabajos en hostelería y restauración.
En el sector del transporte por carretera hay más de 1.200 trabajadores pertenecientes al régimen general y 530 autónomos. La construcción emplea a unos 2.000 trabajadores, de los que 1.100 son asalariados y más de 800 figuran como autónomos.
En una radiografía de los empleados públicos general, las comunidades autónomas son las áreas donde se ha dado un mayor aumento del número de empleados. También es la Administración con más competencias. Sólo en Segovia existen más de 6.200 trabajadores, que incluyen los servicios sanitarios y docentes, que representan los sectores que más empleo público generan.
En todo caso, la evolución ha sido decreciente en los últimos años. Según datos del Ministerio de Hacienda y Función Pública, en el conjunto de las administraciones, en todas la provincias de Castilla y León se registraron caídas en el número de empleados públicos.
El mayor descenso correspondió a Zamora, que perdió 623 trabajadores (-5,46 por ciento), para quedar en 10.777, seguida de Burgos, que se dejó 665 funcionarios (-2,86 por ciento), para un total de 22.519, seguida de Segovia, con una caída del 2,74 por ciento (11.899); Ávila, que perdió un 1,53 por ciento (10.745); Palencia, que retrocedió un 1,17 por ciento (10.597); León, con un descenso del 0,51 por ciento (30.658) y Salamanca, que bajó un 0,25 por ciento, para un total de 24.351 empleados. Valladolid, que se dejó 82 trabajadores (-0,22 por ciento), continúa siendo la provincia con más empleados públicos, con 36.242, mientras que en el extremo opuesto se sitúa Soria con 7.950 funcionarios, 171 menos, lo que supone un retroceso del 2,10 por ciento.
Han sido las administraciones locales las que más vieron reducidas sus plantillas en el conjunto de Castilla y León. En total han perdido 1.244 funcionarios, lo que supone un 3,5 por ciento (34.977), mientras que el personal público dependiente de la Junta de Castilla y León bajó un 0,90 por ciento (-882), hasta los 97.081 trabajadores. La menor variación correspondió a los funcionarios dependientes del Estado, que bajó un 0,70 por ciento, para un total de 33.680.
Además de por la bajada del personal docente no universitario, el retroceso en el número de empelados públicos dependientes de la Junta se debe a la caída del personal dependiente de las distintas consejerías, que se redujo en 680 trabajadores (-3,4 por ciento) para un total de 19.094. En este sentido, cabe destacar que en el año 2019 el personal de las consejerías y sus organismos autónomos sumaba 19.873 empleados; una cifra que pasó a 19.383 en 2020; y a 19.137 en 2021, parea llegar a enero de 2022 con 18.942.
Por el contrario, dentro de la administración autonómica el mayor crecimiento se experimentó entre el personal docente de las universidades, que creció un 7 por ciento (+486), para un total de 7.347. Además, el personal no docente dependiente de las universidades creció un 0,9 por ciento (+33), para alcanzar los 3.437 trabajadores.
RECORD NACIONAL
Según el Boletín Estadístico del personal al servicio de las Administraciones públicas de enero publicado por el Ministerio de Política Territorial, el número de funcionarios en España se sitúa ya en 2.731.117, una cifra histórica de empleo público que incluso queda lejos de las que se contabilizaban en los peores años de la recesión económica, que se inició en 2008. Este aumento de la plantilla pública ha servido, en buena parte, para enmascarar el retroceso del empleo privado.
Así se constata en las últimas encuestas de población activa que publica periódicamente el Instituto Nacional de Estadística (INE), que reflejan el imparable crecimiento del número de trabajadores al servicio de las administraciones y en organismos públicos y el deterioro del procedente de las empresas. Crisis y aumento de la plantilla pública siempre han estado vinculados en España.
Los últimos datos del Boletín Estadístico del Personal al Servicio de las Administraciones Públicas, que elabora el Ministerio de Hacienda y Función Pública muestran que en julio pasado se alcanzaron los 2,73 millones, con un incremento de más 210.000 funcionarios con respecto al mes de julio de 2014. Esta última fecha coincide con el final de la primera legislatura de Mariano Rajoy y con un entorno de recuperación económica tras una dura crisis que tuvo un impacto enorme en el empleo.
La llegada de Rajoy al Gobierno en 2011 supuso un frenazo en la contratación pública, que ahora se ha revertido con el desembarco en La Moncloa de Pedro Sánchez y con los nuevos interinos ‘fichados’ por las comunidades durante la pandemia para cubrir áreas como educación y sanidad. La tasa de reposición cero de Rajoy supuso una drástica disminución de efectivos públicos. Entre 2012 y 2017 la Administración estatal recortó su plantilla en cerca de 60.000 efectivos.
Ahora, el boom de las oposiciones, los efectos colaterales de la pandemia en la plantilla pública -más temporalidad y más efectivos- y el impacto de la crisis en el empleo privado, que se ha ido supliendo con el público, han forzado este nuevo récord. Solo entre enero de 2022 y julio de ese años, la plantilla pública ha aumentado en más de 15.000 trabajadores y en más de 145.000 desde mediados de 2018, periodo que coincide con la moción de censura de Sánchez a Rajoy.
En 2022, según la última Encuesta de Población Activa el sector público creó 50.700 empleos y finalizó el año en un nuevo máximo de 3.526.200 ocupados, en tanto que el empleo privado acabó 2022 con 16.937.600 trabajadores. La EPA, muestra 408.000 empleados públicos más que a cierre de junio de 2018.
A lo largo del año 2023, el empleo público seguirá creciendo y se seguirá convocando nuevas oposiciones, en buena parte para cubrir plazas vacantes por jubilación y, también, para convertir en fijos a los interinos.
Durante el presente año, marcado por las elecciones, se convocara hasta 27.509 plazas en la Administración General del Estado, una estela que seguirán las administraciones económicas y locales. Hasta 11.417 plazas serán de ingreso libre y otras 16.000 de promoción interna.
La Administración Pública Estatal, en la que el 82% de la plantilla son funcionarios de carrera, tiene como principal problema el envejecimiento de la plantilla. La mayoría de sus trabajadores lograron plaza en los 80 y está a punto de jubilarse. En total, será más de 300.000 empleados los que se jubilarán antes de 2025.
La mayor paridad de género se da en la Administración Local: Del total de empleados públicos en la provincia, la mayoría son mujeres (6.815) frente a los hombres (5.084), una diferencia equiparable a la que existe a nivel nacional
El concepto de funcionario suelen ir acompañado de una imagen muy estereotipada, que según el contexto en que se refiera, aparece una escena u otra.
En algunos sectores como las fuerzas armadas o los cuerpos de seguridad se han identificado tradicionalmente con hombres. En sanidad y educación son las mujeres las que predominan. Sin embargo, cada vez se difumina más esa imagen preconcebida.
En Segovia se contabiliza una mayoría de mujeres entre el personal al servicio de las administraciones públicas. Hay 6.815 féminas y 5.084 hombres. La mayor diferencia se da en los servicios públicos de la Junta de Castilla y León, que suman 6.285 empleados. De ellos 4.474 son mujeres, frente a 1.811 que son hombres. La diferencia resulta inversa en el sector público del Estado, que en Segovia tiene 2.482 personas trabajando. De ellas 1.764 son hombres y 718 mujeres. Dentro de este ámbito, las Fuerzas Armadas representan un componente masculino mayoritario.
Es en la administración local donde existe una mayor paridad. Del total de empleados (3.132), existen 1.623 mujeres, y 1.509 hombres.
A nivel de Castilla y León el 57,66 por ciento de los 165.738 empleados públicos que hay actualmente son mujeres. El porcentaje más alto se registra en la Junta, donde las mujeres representan el 79,19 por ciento, con 68.150 sobre 97.081, mientras que en el sector público del Estado son mayoría los hombre, que representan el 69,55 por ciento. En las administraciones locales la situación es pareja con 17.810 hombres y 17.167 mujeres.
