El presidente del Gobierno y candidato a la reelección en las elecciones generales del 28 de abril, Pedro Sánchez, advirtió ayer contra “el viaje a ninguna parte del independentismo, que quiere violentar la Constitución” y de que “la ultraderecha está influyendo en el discurso de PP y Cs” para “recentralizar” el Estado. El jefe del Ejecutivo protagonizó un mitin en el Palacio de Congresos de Zaragoza con un total de 1.700 asistentes.
“Vamos a defender con uñas y dientes el autogobierno y el Estado de las Autonomías”, anunció el candidato socialista, quien dejó claro que “no es no”, que si continúa gobernando “no habrá independencia de Cataluña”. El problema de Cataluña “se llama convivencia y para resolver una crisis de convivencia hay dos caminos, continuar confrontando o apelar al diálogo dentro del Estatuto y de la Constitución”.
En su intervención, señaló que “hay un riesgo real de que la derecha y sus tres siglas sumen una mayoría parlamentaria” y de que repitan el esquema —de pacto— de Andalucía, emplazando a “todos los españoles” a “aunar todos los esfuerzos en el único partido que puede sumar más que estas tres derechas”.
Tras ello, indicó que “existe el riesgo real de que podamos involucionar”, pero “si nos movilizamos no van a frenar esta ola de ilusión y esperanza”.
El PSOE es el único partido que puede sumar “más que las tres derechas” tras las elecciones general, según aseveró Sánchez, tras advertir que existe “riesgo real” de que la derecha sume mayoría parlamentaria en España, como ya ha hecho en Andalucía.
Buena gente del país
El también secretario general del PSOE apuntó que el resto de partidos ya ha hablado de coaliciones y “van juntos de vinos” y aseveró que “juntos los vamos a mandar a la oposición el próximo 28 de abril”.
Frente a las actitudes de la derecha, Sánchez ahondó en que el PSOE quiere llevar al Gobierno “la representación de la buena gente del país”, porque la buena gente “no espía, no crispa y piensa en el futuro de sus hijos y en la pensión de sus mayores”.
Sánchez, quien rememoró al inicio al expresidente aragonés Marcelino Iglesias, recordó algunas de las medidas aprobadas el pasado viernes, como el aumento de la prestación por hijo a cargo y el permiso de paternidad, las medidas de impulso al alquiler de la vivienda o que las mujeres de los dependientes puedan cotizar a la Seguridad Social.
Además, reiteró que con solo 84 diputados, en diez meses y con la Mesa de Congreso “en contra” han logrado avances frente a las políticas del PP e instó a los electores a decidir si quieren un país que “avance hacia el futuro o que regrese al pasado”, en el que quepan todos “o solo el bloque de la involución que se hizo la foto de Colón”.
Y aunque incidió en que existe un “riesgo real” de regresar al pasado también añadió que, si el PSOE se moviliza, la derecha “no va a poder frenar la ola de ilusión” y podrá “moldear” el futuro.
Tarjeta de visita
Sánchez, quien criticó que PP y Cs abracen “argumentos de la ultraderecha” que estaban superados, como la homofobia, el derecho de las mujeres a elegir cuando ser madres o la lucha contra la violencia de género como lacra social, se comprometió a mejorar la financiación local y autonómica de las comunidades más despobladas y sacar adelante, si gobierna, una ley de eutanasia para una muerte digna.
También un nuevo estatuto de los trabajadores que derogue la reforme laboral, el blindaje en la Constitución de la revalorización de las pensiones, la protección del sistema sanitario, el aumento del número de viviendas sociales o la derogación la ley de protección de la seguridad ciudadana.
“Lo que hemos hecho durante diez meses es nuestra mejor tarjeta de visita”, enfatizó y se refirió a otras “muchas más cosas que hacer” que pasan por la justicia social, la lucha contra la corrupción y la convivencia dentro de la Constitución española. Y concluyó que, si el PSOE tiene “una mayoría parlamentaria amplia, como se respira en el ambiente, España será imparable”.
