La lesión que sufre Valentino Rossi necesitará como mínimo de un par de meses de convalecencia y recuperación, dos meses en los que los pilotos de MotoGP van a disputar seis grandes premios, desde Italia hasta Estados Unidos, lo que literalmente le deja sin opciones matemáticas de aspirar al título que defendía.
El campeón del mundo italiano había sido el más rápido ayer, en la primera jornada de entrenamientos libres en Mugello, a pesar de asegurar a todos los medios de comunicación que tenía problemas en el hombro que se lesionó mientras entrenaba.
Hoy era tercero, instantes antes de volar por los aires, cuando rodaba por delante del australiano Casey Stoner y desde el principio se percibió que el resultado del accidente podía ser de gravedad al no poder apoyar la pierna derecha en el suelo y sujetarse la misma con fuerza el propio piloto.
Trasladado a la clínica del circuito se pudo confirmar la gravedad de la lesión que se produjo Valentino Rossi, la más grave de su carrera deportiva, al sufrir una fractura abierta de tibia y peroné en la pierna derecha.
Ahora, Rossi deberá ser intervenido quirúrgicamente de las fracturas y su período de recuperación será largo, por lo que el camino hacia el título de sus rivales ha quedado expedito.
Y quizás haya que buscar la razón de su caída en su afán de doblegar a quienes por entonces se encontraban delante de él en los entrenamientos, los españoles Jorge Lorenzo (Yamaha YZR M 1) y Dani Pedrosa (Honda RC 212 V).
Fuera de la competición Valentino Rossi, el panorama por el título de MotoGP queda abierto al resto de rivales habituales de Rossi, entre los que destacará su propio compañero de escudería, Jorge Lorenzo (Yamaha YZR M 1), autor del mejor tiempo de la segunda tanda de pruebas libres en Mugello y líder en la clasificación provisional del mundial.
Lorenzo se queda en solitario como representante de la fábrica de Iwata (sede central de Yamaha), lo que seguramente le hará destinatario de todas las evoluciones que se realicen en
