Arabia Saudí propuso ayer una tregua humanitaria de cinco días en Yemen tras semanas de bombardeos aéreos y combates pero aclaró que el alto el fuego depende de que los rebeldes chiíes huthis y sus aliados también accedan a deponer las armas, según indicó el ministro de Exteriores saudí, Adel al Jubeir.
Asimismo el secretario de Estado norteamericano, John Kerry, que compareció en rueda de prensa junto a Al Juberi, dio la bienvenida a la propuestas y aseguró que ni Arabia Saudí ni Estados Unidos están hablando del envío de tropas terrestres a Yemen.
Cientos de civiles han muerto en los bombardeos aéreos y los combates se han sucedido desde la coalición liderada por Arabia Saudí, la cual comenzó los ataques contra los huthis el pasado 26 de marzo con el fin de devolver el control del país al presidente Abdo Rabbu Mansur Hadi, que buscó refugio en Riad.
Los combates y el embargo de armas impuesto por la coalición provocaron falta de alimentos y combustible, empeorando la crisis humanitaria en Yemen y haciendo saltar las alarmas en el mundo en este caso.
“La pausa afectará a todo Yemen por un periodo de cinco días. La fecha será anunciada en breve así como los requisitos. Esto se basa todo en que los huthis cumplan con el alto el fuego”, indicó en este sentido Al Jubeir.
Operación terrestre
Arabia Saudí indicó asimismo que mantiene todas las opciones abiertas, incluida una operación terrestre para frenar los ataques con mortero en sus localidades fronterizas por parte de los rebeldes chiíes huthis en Yemen. Por segunda noche, la coalición que lidera Arabia Saudí ha llevado a cabo bombardeos aéreos para intentar acabar con la artillería de los huthis en su bastión de Saada, cerca de la frontera saudí, y el pequeño puerto marítimo de Maidi.
“Es posible repetir el mismo número de salidas, una operación terrestre es posible, todas las opciones están abiertas para evitar estas prácticas de las milicias”, indicó el portavoz de la coalición que lidera Arabia Saudí, el general Ahmed Asseri.
Por ello el secretario de Estado norteamericano indicó también que en las conversaciones en Riad estarían intentando frenar la campaña de bombardeos aéreos que la coalición árabe inició el 26 de marzo y permitir que lleguen alimentos, agua y medicinas que los yemeníes necesitan.