Renault invertirá 500 millones de euros en los próximos cuatro años para la fabricación de un pequeño vehículo eléctrico a partir de 2011, un motor ecológico en 2012, y un nuevo modelo convencional en exclusiva a principios de 2013, con lo que las plantas vallisoletanas tienen garantizada, con «tranquilidad», la producción y el empleo al menos durante cinco años, según informó ayer el presidente de la compañía en España, Jean Pierre Laurent. El ministro de Industria, Miguel Sebastián, más optimista cifró en diez años los que la producción está asegurada. La decisión fue rubricada a las 12.00 horas del lunes en París por el Comité Ejecutivo de Renault tras el beneplácito del presidente, Carlos Ghosn, y del director general delegado, Carlos Patrick Pelata.
Durante la presentación en Valladolid del Plan Industrial de Renault en España, acto al que asistieron el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, el responsable de la marca del rombo en España indicó que este plan ha sido posible gracias al apoyo de la Administración y a la apuesta por la competitividad de las fábricas de Valladolid. Del total de la inversión, 300 millones irán dirigidos al coche convencional, mientras que 70 se destinarán al vehículo eléctrico.
Así, se prevé que en 2013 la planta vallisoletana produzca 100.000 vehículos al año, de los que 20.000 serán eléctricos.
El alto ejecutivo francés, quien aseguró tener el corazón «español», aclaró que la compañía recibirá «ayudas significativas» desde las administraciones españolas y la UE para su plan, y aunque no precisó su cuantía, comentó que las partidas podrían alcanzar entre el 20 y el 25 por ciento de los fondos globales previstos, que aún no están fijados definitivamente. «Lo importante es tener la garantía de un nuevo coche convencional», dijo, y explicó que éste será del segmento B (como el Clío y el Modus), y «responderá a las necesidades del cliente en 2013», lo que supone que será una «evolución del coche tradicional de este segmento, será ecológico y económico».
Jean Pierre Laurent también trasladó su «plena confianza» en el plan del Gobierno de España sobre el coche eléctrico, que incluirá, según dijo, ayudas para la compra de vehículos, para la industrialización y para la puesta en marcha de una red de distribución de electricidad por lo menos en las calles de las grandes ciudades. Un programa en el que se avanzará en una reunión de todo el sector prevista para finales del mes de octubre. Laurent indicó que el pequeño coche eléctrico para Valladolid será uno de los cuatro que presentó la marca en Frankfurt, y asumió que la planta vallisoletana, con sus previsiones, no será en principio la de mayor capacidad de producción de este coche, que a pesar de ello presenta unas expectativas «bastante grandes». «Tenemos previsto ampliar la producción rápidamente si es necesario», agregó.
Por lo que se refiere al motor, transmitió que será «de los mejores del mercado», «muy eficiente» a nivel ecológico, con menores consumos y emisiones de CO2 a la atmósfera, pero con las potencias actuales. «Son los motores del futuro», dijo.
Jean Pierre Laurent reveló que hace diez días no tenía claro que se aprobaría el plan para Valladolid y achacó su consecución a las ayudas comprometidas por la Administración y al convenio colectivo suscrito para toda España, que supondrá un ahorro del conjunto de las fábricas que era necesario para obtener el programa y que refleja la solidaridad de todos los empleados con Valladolid. A pesar de ello, constató que el plan también incluye mejoras en logística y adquisición de piezas, que permitirán unas relaciones fluidas con la futura planta de Marruecos, que inducirá trabajo para las factorías de España.
El presidente de Renault en España agradeció el apoyo de las administraciones y la responsabilidad de los trabajadores para lograr un plan de futuro en el que él puso «toda la carne en el asador», y apostó por seguir trabajando para plasmar el compromiso cerrado ayer. Laurent también agradeció la presencia en Valladolid durante la presentación del embajador francés en España, Bruno Delaye, y afirmó que la planta vallisoletana «nunca» ha competido con las francesas. «Hemos llegado a buen puerto», resumió.
