El presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, recibió ayer a las 13.20 horas la notificación formal del Gobierno británico para activar el proceso del brexit y negociar su salida del boque comunitario, cuyas condiciones deberán pactarse en un plazo máximo de dos años.
El embajador de Reino Unido ante la UE, Tim Barrow, entregaba la misiva a Tusken la que May invoca el artículo 50 del Tratado de Lisboa y comienza el proceso de desconexión con la Unión Europea, poniendo fin a 44 años de encuentros y desencuentros entre el continente y el Gobierno británico.
Donald Tusk advirtió en una comparecencia ante los medios que “no es un día feliz” ni para Londres ni para el resto de Europa. En su breve declaración, afirmó que el objetivo debe ser “controlar los daños” de la salida de un Estado miembro y “minimizar los costes” que la desconexión pueda tener para los ciudadanos, empresas y los países.