Doce efectivos de la Guardia Civil, junto a cuatro agentes de apoyo de la Policía Local, realizaron durante la mañana de este viernes distintos registros en tres establecimientos de la zona centro de Cuéllar, en el marco de una operación conjunta de carácter antidroga, fiscal y de control de alimentos.
Según ha informado la Guardia Civil, el dispositivo contó con la participación de un perro especializado en la detección de sustancias estupefacientes de la unidad canina de la Guardia Civil de Segovia, que acompañó a los agentes durante las inspecciones practicadas en los locales.
En la operación intervinieron también miembros de la Unidad Fiscal desplazados desde Segovia, encargados de comprobar la documentación de los establecimientos y detectar posibles irregularidades de carácter administrativo o tributario. Asimismo, participaron efectivos del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona), que supervisaron los productos alimentarios localizados en algunos de los locales inspeccionados para verificar que se encontraban en buen estado y que cumplían la normativa vigente de la Unión Europea y de España.
Fuentes de la Guardia Civil han señalado que la actuación se llevó a cabo ante la existencia de alarma social entre los vecinos de la zona, que habían manifestado su inquietud por distintos motivos relacionados con la actividad de estos establecimientos. Por este motivo, se decidió realizar una inspección sorpresa con el objetivo de detectar posibles irregularidades en distintos ámbitos.
