No sabemos qué pasará al finalizar de temporada -esta es muy larga-, pero lo innegable es que el Viveros Herol Nava ha comenzado su andadura en la Liga Asobal de un modo increíble. Probablemente mucho mejor que las expectativas que tenían durante la planificación de la campaña. Se dice que mantenerse en una categoría deportiva es complicado, es cierto, pero a veces es mucho más complicado ascender. No sé si alguna de las personas que nos gusta el deporte hubiésemos imaginado que el todo poderoso Barcelona en competición oficial jugaría en un pequeño pueblo segoviano, del que seguramente antes no hubiese oído hablar.
Este equipo demuestra una vez más, que con apoyo económico, sin este apartado es complicado llegar a alcanzar algunas metas en cualquier deporte aunque tengas muchísimas potencialidades, pero sobretodo con mucho trabajo, ilusión y unión de equipo se pueden alcanzar los objetivos que podrían parecer inalcanzables. Muy importante también tener directivos que se ‘muevan’ y busquen recursos en lugares diversos, ya que es esencial tener un patrocinador principal, fundamental, pero también lo es la ayuda de esos pequeños colaboradores que cubren otras parcelas, y para llegar a estos se necesitan tocar muchas puertas. Quizás ahora en Asobal todo sea un poco más fácil en cuanto a patrocinios, pero desgraciadamente balonmano no es fútbol, así que imagino que no pueden relajarse para que el club tenga cubierto todo su presupuesto.
No quiero dejar de aplaudir también a su afición, ahora es fácil ir al pabellón, pero es que ellos no lo han dejado de hacer desde hace años. Es una afición que disfruta del balonmano y nunca deja de apoyar a su equipo.
Pienso que este club debe servir de ejemplo al resto de clubes segovianos respecto a la gestión deportiva y directiva. No se trata de dar lecciones a nadie, cada uno tiene su estructura, pero creo que aquello que funciona está bien tenerlo en cuenta y aprender de ello.
