El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, aseguró ayer que él no se «cierra» a reformar la Constitución, pero ha señalado que esa modificación del texto fundamental no es la «prioridad» de España. En cualquier caso, aseguró que está dispuesto a «escuchar» a otros partidos. A su llegada al acto institucional del Congreso con motivo del 37 aniversario de la Constitución, Rajoy afirmó que la Carta Mana “goza de una salud muy buena”. “Bajo el ordenamiento de la Constitución hemos vivido los españoles durante muchos años y espero que sigamos haciéndolo en el futuro”, proclamó. Eso sí, admitió que esa norma fundamental se puede reformar como ya se ha hecho en el pasado en dos ocasiones. “Yo no me cierro evidentemente. Si alguien quiere hacer un planteamiento, estoy dispuesto a considerarlo”, apostilló.
A su entender, más que cambiar la Carta Magna, la prioridad de España pasa por crear empleo, consolidar el sistema de pensiones y servicios públicos fundamentales, defender la unidad de la nación y luchar contra el terrorismo. El jefe del Ejecutivo aseguró que es “bueno” tener una Constitución “por consenso”, acordando “algunas cosas” entre “todos” los partidos, como “lo que sea España”, la política exterior y de defensa o cómo se van a financiar las pensiones en los años venideros. En este sentido, resaltó que hay asuntos en los que es “obligado” que estén “todos” de acuerdo o al menos lo intenten. Y como sucede en otras democracias, prosiguió, que el que gane “haga lo que cree que es mejor para España” en otros temas.
El presidente del Gobierno consideró que el PP va a ganar las elecciones generales el 20 de diciembre y, de hecho, cree que su partido tiene margen de mejora en estos días de campaña. Sin embargo, no ve claro quién podrá ser la segunda fuerza porque ve el escenario muy abierto. Así se pronunció en una conversación informal con los periodistas, donde saludó a Albert Rivera y Pablo Iglesias y donde confesó que le caen bien sus tres rivales políticos. Ante el panorama electoral que recogen las encuestas de pactos para poder gobernar, Rajoy cree que el PP puede obtener mejor resultado que el que recoge la macroencuesta del CIS. A su entender, su partido puede sacar mejor resultado y afirmó que van a trabajar para llegar al 30% de los votos.
Además, señaló que intentará buscar la mayor distancia posible con el segundo, si bien no ha quiso concretar en cuántos puntos le gustaría superar al siguiente partido más votado. Preguntado por los ocho puntos de ventaja del PP sobre el PSOE en el CIS, admitió “quién no quiere tener incluso más ventaja todavía”. Rajoy, consideró que no le pasará factura su ausencia del debate a cuatro de hoy. De hecho, confesó que habría acudido si hubiera creído que le va a pasar factura y afirmó que confía en la vicepresidenta y que no los ve “complicado” para ella.
