La calidad del agua y el control de la red de abastecimiento son algunos de los aspectos en los que la oposición municipal ha incidido desde que el equipo de Gobierno anunció la subida de la tasa correspondiente para el próximo año. Tras la aprobación de las Ordenanzas Fiscales de 2016 en el pleno extraordinario del 21 de octubre, el Grupo Municipal de Ciudadanos presentó una moción al pleno ordinario de ese mismo mes, celebrado el pasado viernes, para que el Ayuntamiento exija a la Confederación Hidrográfica (CHD) la limpieza del vaso del embalse del Pontón y para que se renueve completamente la red sustituyendo tuberías de fibrocemento.
Aunque la tasa por el servicio integral del agua y las demandas de Ciudadanos parezcan aspectos diferentes en torno a un bien básico y escaso, la portavoz de C’s en el Ayuntamiento, María José García Orejana, insistía esta semana en que no tiene sentido aumentar la presión fiscal sin haber adoptado antes medidas para intentar ser más eficaces en la gestión pública del agua.
La concejala de Obras, Servicios e Infraestructuras, Paloma Maroto, informó en el pleno de que la CHD considera inviable la limpieza del vaso del Pontón Alto en parte por el coste elevado de esta operación y, en parte, por los problemas que plantearía a los municipios de la Mancomunidad de la Atalaya, que también se abastecen de este embalse. Como se recordará, el Gobierno municipal decidió cortar el suministro desde este pantano a Segovia en el mes de septiembre por problemas de eutrofización causados por los nutrientes existentes en el agua embalsada. La edil informó de una posible solución propuesta por la Confederación cuando el embalse se llene el próximo invierno, abriendo el desagüe inferior de la presa de manera que arrastre algas y otros materiales causantes del problema.
Sin embargo García Orejana considera que el Ayuntamiento debería insistir en la necesidad de limpiar el vaso para asegurar la calidad del agua y llama la atención sobre una vieja reclamación del Grupo Municipal Socialista, la recrecida de Puente Alta, cuyo coste sería muy superior al de la limpieza. Asegura que el consumo de agua en el municipio fue de 5,84 millones de metros cúbicos en 2014 y los dos embalses actuales —Pontón -Alto y Puente Alta (Revenga)— prácticamente duplican esa cantidad, lo que haría innecesario, en su opinión, una nueva infraestructura millonaria.
Pone de relieve también la diferencia existente entre el agua que sale de la estaciones de tratamiento o ETAP, recogida en los caudalímetros, y la que figura como consumida tras la lectura de contadores, lo que a su juicio requiere un mayor control de la red.
Otros grupos de la oposición, como el del PP, también han criticado la política del equipo de Gobierno de subir la tasa de agua. La portavoz, Raquel Fernández, en una entrada en su blog —raquel-fernandez.es— esta semana titulaba ‘No entiendo nada’ para indicar que, mientras “baja el coste de la vida por segundo año consecutivo, a nosotros nos siguen subiendo los impuestos. Pues sigo sin entender donde está la política social en todo esto”.
