Durante algo más de dos meses, la melodía del centrifugado de las lavadoras se ha convertido en la banda sonora de las madrugadas de muchos hogares. Además, hay quienes han asumido el hábito de programar el lavavajillas a las cuatro de la mañana e, incluso, poner el despertador en mitad de la noche para planchar la ropa o cocinar la comida del resto del día. En los meses de verano, los segovianos han añadido a estas actividades el aire acondicionado, un electrodoméstico esencial en muchas viviendas durante los días de más calor.

Quizá estas rutinas eran ya algo ordinario para muchas personas. No obstante, otras han tenido que acostumbrarse a ellas a partir de la configuración de una nueva tarifa de la electricidad el 1 de junio, que discrimina el precio por tramos horarios. Así, se configuran tres intervalos: periodo ‘punta’, con coste más elevado, que va de 10.00 a 14.00 y de 18.00 a 22.00 horas; el ‘llano’, con un valor intermedio, que discurre de 8.00 a 10.00, de 14.00 a 18.00 y de 22.00 a 24.00 horas. Por último, el tramo ‘valle’, en el que menos se pagará por el uso de la electricidad, que va desde las 24.00 a 8.00 horas los días laborables y se podrá disfrutar de él los sábados, domingos y festivos en horario completo.

Según indica la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), si se consigue evitar el periodo ‘punta’, se pueden ahorrar en torno a 30 euros al año. Además, se podría alcanzar un beneficio total de 547 euros si solo se hiciese consumo de los electrodomésticos en horario ‘valle’. Un hecho que para muchas personas es complicado, ya que supondría alterar sus rutinas. O, incluso, imposible, debido a sus obligaciones laborales. Así, frente a esta modificación de la tarifa de la luz, FACUA considera “denigrante” el pedir a los usuarios que desplacen el consumo eléctrico a la madrugada.

Situación de particulares

Según datos del Instituto Nacional de Estadística, el precio de la electricidad ha incrementado casi un 27% respecto al mismo periodo del año pasado. La presidenta de la nueva Federación de Asociaciones de Vecinos de Segovia (Fedasve) y, a su vez, de la Asociación de Vecinos de Santa Eulalia, Esther Santos, indica que esta nueva tarifa horaria ha repercutido a la población segoviana “de manera bastante negativa”. Sobre todo, destaca a las personas más mayores, la más vulnerables. “Tenemos constancia de gente para la que simplemente encender la vitrocerámica supone muchísimo. Lo que hacen es cocinar para dos días y luego calientan en el microondas”, detalla.

“Este incremento supone un obstáculo que puede llegar a ser insalvable para muchos negocios”

Esto se debe a que muchos vecinos solo tienen un único ingreso: la pensión, la cual a veces no llega ni a 700 euros, por lo que tienen que controlar el más mínimo gasto de luz y electricidad.

“Ahora tenemos suerte porque en verano hay más horas de luz, aunque es cierto que hay un mayor uso del aire acondicionado”, indica. Y para muchos, es imposible mantener encendido este electrodoméstico solo en las horas ‘valle’. en los días de más calor. De hecho, según un estudio que la asociación ha realizado y pronto harán público, la factura de la luz para algunos de los vecinos “ha aumentado en un 190% respecto al pasado mes de junio, lo que supone para muchos un incremento de 40 euros mensuales, algo que es inasumible”, lamenta.

Por ello, declara que hay vecinos que están lavandola ropa a mano para no poner lavadoras, pues en el periodo en el que la luz está más barata ellos están dormidos o no les parece conveniente, “ya que muchas personas se levantan a las cinco de la mañana para ir a trabajar”, asegura. No obstante, lo que realmente preocupa a Santos es el invierno: “Sabemos que muchos vecinos no tienen calefacción, ¿qué pasa si esta subida de la luz se produce en una ola de frío?”.

“La mayoría del coste de la luz son impuestos por emisiones de CO2 y renovables”, asevera la presidenta. Por ello, exige “pagar exclusivamente por la luz que consumimos, como hacen en Francia y Alemania”. Así, contemplan elevar las quejas que han transmitido los vecinos sobre esta problemática al Gobierno en los próximos días.

Por su parte, el presidente de la Federación Provincial de Asociaciones de Vecinos, Julián M. Sancho, se posiciona contrario también a esta modificación: “Afecta mal a todos los vecinos, porque esta subida no solo repercute en el recibo de la luz, sino también en todos los productos, que van a alzar de precio”, considera. “Si el precio de la luz sigue subiendo con esta magnitud, son las empresas las que más lo van a notar”, añade el presidente.

Aunque desde esta organización que también agrupa a consumidores y usuarios no hayan sido conocedores de quejas por parte de los vecinos, Sancho indica que el incremento sería un motivo justificado para movilizarse contra el Gobierno, “de la misma manera que hicimos cuando subieron el agua hace ocho años”, recuerda. Para hacer frente a esa problemática, el presidente considera que sería necesario “no cobrar el 21% de IVA”. Pues, tal y como sucede con el agua, es un bien básico que debe ser accesible a todo el mundo.

Muchas empresas no tienen la posibilidad de discriminar su actividad laboral
por horarios

Ciertamente, el impuesto de la luz en España es del 21% de manera general, aunque a finales de junio el Gobierno aprobó e incluyó en el Boletín Oficial del Estado un Decreto ley para rebajarlo al 10%. Una medida que es temporal, ya que permanecerá hasta finales de este año, y que solo afecta a algunos consumidores. En concreto, los beneficiarios de esta iniciativa deben cumplir una serie de requisitos.

En primer lugar, deben tener contratada una potencia de la luz igual o inferior a 10 kilovatios (kW). En segundo lugar, se aplicará solo si el precio medio mensual del mercado mayorista de la luz supera los 45 euros por megavatio-hora (mWh). Precisamente, ayer el mWh se disparó a un precio medio de 117,3 euros, lo que lo convierte en el quinto récord histórico consecutivo, coincidiendo con la ola de calor. Según datos del Operador del Mercado Ibérico de Energía-Polo Español (OMIE), el precio medio del mWh en el mismo periodo del año pasado era de 40 euros, lo que supone un incremento del 190%, tal y como estipulaba Santos.

Por último, se beneficiarán de esta bajada del IVA de la luz todos los usuarios del mercado regulado que tengan en vigor el Bono Social y reconocida la condición de vulnerabilidad.

Las grandes afectadas

Esta rebaja del impuesto a la electricidad no se aplica a la mayoría de los negocios, que tienen una potencia superior a la exigida. Además, trabajan en unos horarios que impiden a muchas de ellas discriminar sus labores en los periodos de menor coste. Si a esto se suma el mayor gasto y facturación, las empresa se convierten en las grandes afectadas de la nueva tarifa eléctrica.

La Confederación Española del Comercio (CEC) estima que el último cambio de modelo de tarifa en suma al reciente encarecimiento de la electricidad han elevado la factura de la luz hasta un 50%, lo que tiene una gran repercusión en comercios que, por ejemplo, hacen gran uso de ella al disponer de maquinaria, hornos o, por ejemplo, cámaras frigoríficas.
A causa de ello, la Federación Empresarial Segoviana (FES) ha pedido recientemente al Gobierno poner límite al incremento de la factura, pues “hay que tener en cuenta que muchas empresas son grandes consumidoras y para ellas la energía representa una parte importante de sus costes”, explica el presidente de la Federación, Andrés Ortega.

Ante el temor de que esta problemática se extienda y se agrave con el tiempo, Ortega eleva al Ejecutivo sus preocupaciones. “Este incremento de uno de los costes más importantes para la actividad económica supone un obstáculo que puede llegar a ser insalvable para muchos negocios que continúan afrontando deudas y problemas de liquidez después de un año y medio de restricciones y cierres obligado”, puntualiza. Un hecho que se convierte en “un factor crítico para su rentabilidad y para poder competir tanto en el mercado nacional como en el internacional”, estima el presidente.

Algunos negocios de la ciudad ya son conscientes del problema. La Panificadora Sin Gluten, situada en el paseo Conde Sepúlveda, pertenece a la vez al sector panadero y hostelero. “Hemos notado un incremento impresionante, y cada vez va a más”, asegura Alicia Torrego, regente del negocio junto a su marido Ernesto Camacho.

La nueva tarifa eléctrica no se puede aplicar a su empresa, “no tenemos opción de discriminar por horarios, ni en la cafetería ni en el obrador”, sostiene. Es cierto que en la actualidad usan el horno para “hacer todo de seguido y no tener que estar encendiéndolo y apagándolo”, lo que supone un mayor consumo de energía, pero en lo demás es imposible realizar las labores en los periodos de coste más barato. A pesar de ello, aseguran que, por el momento, esta subida del recibo eléctrico no repercutirá en el precio de los productos.

Enrique Ruiz, propietario del comercio de iluminación Electricidad Ruiz en la calle Juan Bravo, indica que, afortunadamente, al ser pequeño autónomo, su negocio no necesita mucha potencia. “Pero la mayoría de las empresas tienen más de 10 kW contratados y les cobran un 21% de IVA, lo que es un atraco a mano armada”, manifiesta. Así, anticipa que, a partir de este mes, “van a cerrar muchos negocios y, si no, al tiempo”, lamenta.

En su tienda se pueden comprar bombillas y luces led, además de otras tipologías, de diversidad de fabricantes y que responden a multitud de características. No obstante, algo seguro es que “estoy vendiendo cada vez más led y menos bombillas, pero esta situación ya lleva unos años”, define Ruiz.

El encarecimiento de la electricidad podría restar poder adquisitivo a los ciudadanos

De este modo, hay indicios de que los usuarios apuestan por la eficiencia energética. Y no es a consecuencia de la nueva tarifa eléctrica, sino que esta es una realidad que se ha configurado desde hace años. Según determina Ruiz, “entre una bombilla y un led hay una diferencia del consumo de un 90%, mientras que la diferencia con las bombillas de bajo consumo era de aproximadamente el 40%”.

Por otro lado, para Antonio Herranz, propietario de la Carnicería Salchichería Herranz, emplazada en la calle José Zorrilla, la puesta en marcha de la tarifa eléctrica por tramos horarios no ha supuesto nada nuevo. “Nosotros ya teníamos este sistema desde hace tiempo, es una tarifa industrial diferente a la doméstica, por eso este cambio no nos influye en nada”, asevera. Sin embargo, “otra cosa es la subida de la luz, ya veremos qué pasa con eso en la próxima factura”, enuncia.

Cámaras encendidas 24 horas

“La electricidad es un bien necesario, necesarísimo, no solo para nosotros, sino para todo el mundo”, reclama Herranz. Para conservar la carne de su tienda, es esencial disponer de cámaras frigoríficas que trabajan durante todo los días del año. A ello se suma en verano el aire acondicionado, lo que supone un gasto extra que se añade al total del recibo de la luz. “Antes tenías un contador y veías lo que gastabas, ahora te lo dicen”, manifiesta.

Cerca de este comercio se encuentra el Supermercado Día. Su encargada Patricia prevé que la modificación de la tarifa emparejada a la subida del precio de la luz encarecerá, sin ninguna duda, el recibo. Esto se debe a que, en las grandes superficies, el gasto se multiplica. “Las luces se encienden a las 6.30 horas y se apagan sobre las 22.00”, determina. En un parecido horario, funciona el aire acondicionado y, por otra parte, los hornos trabajan de 7.00 a 19.00 horas. También disponen de una gran cantidad de cámaras frigoríficas y de congelados que están encendidas todo el tiempo.

Una problemática que, como se ha anunciado, podría repercutir en los consumidores. De hecho, Ortega recuerda que este “tarifazo” resta poder adquisitivo a los ciudadanos y, por tanto, “es otra amenaza para sectores como el comercio, la hostelería o el turismo, que dependen básicamente del tirón del consumo privado”, concluye.

Aire acondicionado para sobrevivir a la ola de calor

El calor se recrudece hoy con una temperatura máxima de 38 grados en la ciudad y alerta naranja en toda la provincia, según recoge la Agencia Estatal de Meteorología. Por ejemplo, en Cuéllar se podrá llegar a los 40 grados. Por ello, el aire acondicionado se ha convertido en el electrodoméstico compañero y protagonista de los hogares de muchos segovianos. Su encendido muchas veces se prolonga en las horas centrales del día, por lo que muchas veces es imposible adaptarse a los tramos ‘valle’, con un coste de la electricidad más barato.

Juan Antonio es empleado de la tienda de electrodomésticos Euronics Segovia, con emplazamiento en la calle José Zorrilla, que cuenta con casi 15 años de trayectoria. En comparación con toda su serie histórica, “es el año que menos aires acondicionados se están vendiendo”, asegura. Esto puede deberse a las temperaturas, no necesariamente a la subida del precio de la luz, ya que “este verano no ha hecho mucho calor, esta es la primera semana en la que está haciendo bastante”, añade. Así, puntualiza que, normalmente, “en junio y julio se vendían muchos más”. En esta misma línea, Enrique Ruiz, de Electricidad Ruiz, comparte la misma visión. “Ha hecho un verano tibio, quizá a partir de esta semana se venderán más”, enuncia. Él no se refiere a los aires acondicionados, sino a los ventiladores de agua, que se han convertido en otra opción diferente y recurrida por muchas personas. “Estos ventiladores consumen poco, en torno a 60 vatios; y, a su vez, enfrían bastante”, asevera, de manera que muchos clientes han visto en ellos una solución rápida y fácil para sobrellevar los días más calurosos.

Ambos coinciden en que algunos de los electrodomésticos que más consumen de la casa son, sobre todo, los frigoríficos, las lavadoras, las secadoras y los lavavajillas. Por tanto, Juan Antonio garantiza que cada vez más personas acuden a su tienda con un objetivo primordial: conseguir la máxima eficiencia energética. Un hecho que permite ahorrar unos euros a finales de año en el recibo de la luz, según contempla. Aunque, en la mayoría de las ocasiones, la compra del electrodoméstico se encarezca por este motivo.