La Diócesis de Segovia ha concedido el IX Premio San Alfonso Rodríguez a Esperanza Gilarranz Díaz, vecina de Bernuy de Porreros, en reconocimiento a su dedicación constante y discreta al servicio de la parroquia de Santiago Apóstol y de su entorno. Desde 2017, este galardón distingue a los fieles que, con sencillez y constancia, sostienen la vida parroquial, coincidiendo con la festividad de san Alfonso Rodríguez, santo segoviano que simboliza la fidelidad y humildad en el servicio cotidiano.
El Premio busca visibilizar la labor silenciosa de quienes, desde su entrega y discreción, contribuyen al bienestar de la Iglesia y de la sociedad. Con este galardón, la Diócesis pretende reconocer a personas que trabajan con constancia, sin buscar protagonismo, y cuya dedicación hace posible la vida parroquial y comunitaria de forma cotidiana.
Esperanza Gilarranz es esposa, madre de tres hijos y abuela de dos nietos. Su vida familiar ha sido un testimonio constante de amor y entrega, valores que ha trasladado también a su labor comunitaria y parroquial. Desde hace más de treinta años, su compromiso con la parroquia de Santiago Apóstol ha sido constante, ejerciendo una intensa labor catequética, acompañando a generaciones de niños en su preparación para los sacramentos y transmitiendo valores de fe y convivencia.
Además de su trabajo en la catequesis, ha cuidado los ornamentos litúrgicos y las vestiduras sagradas, contribuyendo a mantener el decoro y la belleza de las celebraciones. Su participación en el coro parroquial ha sido destacada, animando las ceremonias y acompañando con su voz los momentos litúrgicos más significativos. También ha desempeñado funciones como celebradora de la Palabra, mostrando disponibilidad y compromiso ante la nueva realidad pastoral de la Diócesis.
Su entrega se extiende más allá de la parroquia. Esperanza ha formado parte del grupo de Cáritas en Bernuy de Porreros y localidades cercanas, acompañando a quienes más lo necesitan y mostrando una mirada atenta y compasiva hacia los vecinos en situación de vulnerabilidad. Durante la pandemia mantuvo contacto con personas mayores y con quienes vivían en soledad, interesándose por su salud y necesidades y fortaleciendo la red de cuidado comunitario.
En el ámbito civil, su compromiso ha sido igualmente activo. Ha colaborado con la Asociación Española Contra el Cáncer y participado en iniciativas municipales y vecinales, demostrando que la fe puede expresarse también a través de la acción social y la participación ciudadana. Su trayectoria evidencia cómo la labor cotidiana, discreta y constante, puede convertirse en ejemplo de servicio y solidaridad.
La entrega del IX Premio San Alfonso Rodríguez tendrá lugar el próximo 26 de octubre a las 17 horas en la iglesia parroquial de Santiago Apóstol de Bernuy de Porreros. El acto se iniciará con la Eucaristía presidida por el obispo de Segovia, Jesús Vidal, y contará con la participación de la comunidad parroquial, familiares de la premiada y vecinos del municipio.
