Los concejales del PP en el Ayuntamiento de Segovia dan casi por seguro que los nuevos autobuses urbanos estarán rodando por las calles de la ciudad cuando empiece la campaña de las próximas elecciones locales. La viceportavoz del Grupo Popular, Azucena Suárez, avanza que la principal formación de la oposición municipal se abstendrá en el pleno convocado para mañana viernes cuando la corporación debata la adjudicación del contrato del transporte público, uno de los más importantes del Consistorio segoviano, pero no sin que antes el Gobierno socialista reciba un aluvión de críticas por su gestión en el procedimiento de licitación.
En este sentido, Suárez, quien compareció en rueda de prensa acompañada del concejal de su grupo Juan Antonio Miranda, recuerda los “reiterados retrasos” que ha sufrido el procedimiento, con el contrato caducado desde junio de 2016: “más de dos años de retraso acumula y, en lugar de trabajar en él a tiempo, desde finales de 2014 o comienzos de 2015, el equipo de Clara Luquero lo fue demorando, más preocupado en ese momento por ganar las elecciones, y no fue hasta finales de 2015 cuando empezaron a trabajar en el pliego”.
Sostiene la edil del PP que se trata “de una constante en la gestión de los socialistas; no han sacado un contrato en tiempo y forma y los retrasos se van acumulando en las que deberían ser prioridades para la ciudad”.
Suárez reitera que “al final se han dado toda las prisas del mundo para llegar a punto a la campaña electoral de 2019”.
Este grupo municipal mantiene que, a pesar de las dificultades que encontraron durante el procedimiento, como la imposibilidad de conocer el contenido del estudio encargado a una consultora de movilidad y el del pliego antes de su inicio, los populares hicieron propuestas en la primavera de 2016 y en septiembre de ese mismo año, como una mejora para la Línea 9, la del casco antiguo, que según Suárez incluso los técnicos municipales consideraban viable.
Otro aspecto en el que insistió el Partido Popular entonces fue que dos técnicos y no uno supervisaran la documentación aportada en las ofertas de las empresas licitadoras para dar mayor garantía y objetividad al procedimiento, pero “tampoco se nos hizo caso”, indica.
Miranda afirma por su parte que el diseño de las líneas “no es el más adecuado” y comenta que el Grupo Municipal Popular abogaba porque la Línea 7 incorporase la calle José Zorrilla a su recorrido o que la Línea 9 diera servicio, como en la actualidad, a parte del barrio de San Millán e incluso al del Salvador.
Sobre el pliego, dice que quedó cerrado la tipología de autobuses hasta el extremo de que las tres empresas que han licitado “han presentado el mismo modelo de vehículo”. “Ha estado poco abierto a las posibilidades que ofrece la Ley de la competencia”, sostiene.
En cualquier caso, con su abstención el PP favorece la adjudicación del contrato “porque nuestro grupo no ha querido poner palos en las ruedas de este proceso que ya bastante retraso lleva, no queremos ser quien lo impida”, aclara Suárez.
