La suplencia de Íker Casillas frente al Betis en el estreno liguero del Real Madrid todavía trae cola. Y más aún cuando algunos medios audiovisuales descubrieron la conversación que mantuvo con el entrenador de porteros del Real Madrid, Juan Canales, antes del pitido inicial sobre el césped del Bernabéu. En la conversación se aprecia cómo el técnico le pregunta: «¿Qué tal?», y el jugador le contesta: «Pues bien…, por lo menos puedo jugar el Trofeo Bernabéu. Después de todo…». Por las palabras se puede descifrar que al cancerbero blanco no le sentó nada bien la suplencia en el debut liguero. Además, acto seguido no realizó los ejercicios habituales de calentamiento previos al encuentro. Por lo que el lío bajo los palos ‘merengues’ sigue latente.
La irónica y resignada frase del mostoleño por disputar el honorífico Trofeo madridista tiene su esencia, ya que Casillas lleva dos años sin cubrir la portería del Bernabéu en este encuentro, puesto que no estuvo ante el Galatasaray porque José Mourinho se enfadó con él porque llamó a Xavi y Puyol para calmar los ánimos tras un partido de Supercopa con mucha tensión en el Camp Nou (el día que el portugués metió el dedo en el ojo a Tito). La temporada pasada su ausencia no sorprendió tanto, puesto que la mayoría de titulares descansaron ante el modesto Millonarios. El enfado del capitán ‘merengue’ por no estar presente en el debut liguero es monumental y, ahora, corren rumores de que se está planteando dejar el Real Madrid. Incluso se ha puesto fecha a su marcha: diciembre.
Con el Mundial de Brasil en el horizonte, Casillas no quiere resignarse a ser un ‘segundo plato’ y poner en riesgo la llamada de Del Bosque por falta de minutos, ya que de entrada nadie le está asegurando la titularidad. Es más, parece que seguirá de suplente en detrimento de Diego López, una situación que nadie esperaba, y mucho menos, el propio jugador.
Por su parte, el técnico Carlo Ancelotti, en la rueda de prensa posterior al encuentro ante el Betis, reconoció que: «Es una decisión por pequeños detalles. Para este partido Diego fue el portero. A ver qué pasa en el siguiente». Su frase demuestra la competencia existente en un puesto tan importante como la portería.
Y, además, su idea de rotar a sus dos porteros esta temporada en función del partido. Aunque ésta sería la implantación de una nueva fórmula, puesto que el entrenador italiano siempre se ha caracterizado por confiar en un solo guardameta. Durante sus años en el Milan, Dida fue el titular; en el Chelsea, Peter Cech, y Salvatore Sirigu lo fue en el París Saint-Germain. Carlo Ancelotti ya se enfrenta a un nuevo debate semanal.
