Los segovianos utilizan más el transporte público de autobuses, el volumen de tráfico por la ciudad ha diminuido, salvo en horas punta, se registran menos accidentes y hay más facilidades para aparcar en zonas conflictivas como el recinto amurallado. El diagnóstico lo hace el jefe de la Policía Local, Julio Rodríguez Fuentetaja, con 25 años al frente de un cuerpo policial que hoy, 1 de marzo, celebra a su patrón, el Santo Ángel de la Guarda.
Los asuntos de tráfico apenas ocupan el 20% de toda la actividad que desarrolla a diario la Policía Local, aunque “quizá sea lo más llamativo”, dice Rodríguez Fuentetaja. Como primera premisa, el jefe policial advierte que las obras están condicionando la circulación y, como ejemplo, los problemas de retenciones como consecuencia de las obras en la carretera de San Rafael. En todo caso, a su juicio el volumen tráfico ha experimentado un descenso significativo, salvo en las ‘horas punta’. ¿El motivo?. El jefe policial intuye que uno de los factores es el descenso en la actividad económica, como consecuencia de la crisis, que ha reducido la necesidad de desplazamientos en vehículos privados. También que muchos segovianos han optado por dejar los coches en los garajes y utilizar el transporte público, que es “más cómodo y más barato”, afirma el jefe de Policía Local, que dirige una plantilla con 107 agentes. “El tráfico está racionalmente bien”, subraya.
¿Y el aparcamiento?. Rodríguez Fuentetaja asegura que el nuevo aparcamiento de Padre Claret “ha solucionado bastante” el problema del estacionamiento en la zona oriental, sobre todo los fines de semana y de cara a los visitantes que acceden a la ciudad por este punto. Por otra parte, sostiene que la implantación de la “zona verde” en el recinto amurallado, que sugería el Plan de Movilidad Urbana (PMUS), ha sido una medida acertada. Rodríguez Fuentetaja sostiene que se ha logrado aumentar el uso del transporte público para acceder al casco antiguo, donde “ahora hay más plazas libres para aparcar”. “Antes, incluso, los residentes con tarjeta no encontraban sitio” y “en cambio ahora—añade— se abren más posibilidades para aparcar, creo que se están cumpliendo los objetivos del Plan de Movilidad”.
El jefe policial también destaca la eficacia de medidas como la denominación de zonas VAP (Vías de Atención Preferente) para las principales arterias de la ciudad. “La doble fila, que creaba numerosos problemas, ha disminuido bastante, al ser vía VAP la multa es importante y supone retirada de puntos, los conductores están concienciados”, afirma.
Ezequiel González, Conde Sepúlveda, Juan Carlos I, Padre Claret y Vía Roma, que soportan el paso de unos 20.000 vehículos diarios como media, siguen siendo las vías más conflictivas y las que más accidentes registran, aunque en 2009, según indica Rodríguez Fuentetaja, ha disminuido un 5% el número de siniestros.
3.000 llamadas
Al margen del tráfico, la Policía Local atendió solo en el último año unas 3.000 llamadas del servicio de emergencias 112; la mayoría de origen asistencial o sanitario. Los agentes prestan apoyo y acompañan a los sanitarios a todas las llamadas de emergencia del casco urbano; para atender, por ejemplo, personas indispuestas o que sufren accidentes en plena calle. Rodríguez Fuentetaja explica que los agentes también realicen múltiples intervenciones para mediar entre conflictos privados entre vecinos, y de apoyo al Cuerpo Nacional de Policía en temas de violencia doméstica. “Hay muy buena relación y coordinación entre los tres cuerpos de seguridad, Policía Local, Nacional y Guardia Civil”, subraya el jefe policial.
En cuanto al vandalismo, Rodríguez Fuentetaja señala que es un problema “complicado” que “es difícil de erradicar” porque “no se centra en un solo punto, un día aparece una cabina rota en San José y otro día en San Lorenzo”. “Apelamos al ciudadano que lo vea, que nos llame, porque la Policía no puede estar a todas horas en todos los sitios”, dice.
