Un buen día, Juan Pedro Aragoneses decidió dar un paseo en bicicleta con su hijo, Juan, eligiendo un recorrido cercano a su domicilio. La pareja se lo pasó en grande durante la ruta que realizó por Valdeprados y, al volver a casa, ambos decidieron repetir la experiencia. El padre se preocupó entonces de buscar bibliografía sobre rutas de cicloturismo para familias, sorprendiéndose de que, en Segovia, no existiera ningún libro al respecto. Este contratiempo no impidió a Juan Pedro y a Juan llevar a cabo su propósito y así, a lo largo de los últimos tres veranos, han pedaleado juntos por cerca de 70 itinerarios, de cada uno de los cuales fueron escribiendo un breve resumen, germen del libro “Cicloturismo base en la provincia de Segovia: Itinerarios sencillos y familiares”, publicado en la colección ‘Naturaleza y Medio Ambiente’ de Caja Segovia.
“Hemos disfrutado mucho haciendo estos recorridos”, recordaba ayer, echando una mirada atrás, Juan Pedro Aragoneses. El autor de la obra dice que, a la hora de diseñar los itinerarios, intentó que primara la seguridad de los cicloturistas. “Dado que yo pretendía elaborar recorridos que pudieran realizarse con la familia, intenté que fueran seguros, para evitar problemas con los niños”. En ese sentido, la mayoría de los itinerarios incluidos en la obra transitan por caminos poco utilizados por vehículos.
De igual forma, las rutas ideadas por la familia Aragoneses son muy sencillas. Van de cinco a 22 kilómetros, por lo que su grado de dificultad es bajo.
Pedaleando por la provincia, Aragoneses dice haber aprendido “muchísimas cosas de Segovia”, especialmente de la riqueza de su patrimonio y sus paisajes, sin olvidar su flora y su fauna. “Hemos descubierto rincones bellísimos”, afirmaba ayer. Entre todos ellos, Aragoneses no sabe cual es su preferido. “Quizá el que pasa por Riofrío, por aquello de que permite ver los ciervos y los gamos”, declaraba, no muy convencido.
Sobre el texto del libro, Aragoneses ha intentado no usar tecnicismos, con la intención de hacerlo más accesible a los más pequeños a los que, según su experiencia, “basta con explicarles a grandes rasgos que lo que están viendo es el Castillo de Coca”.
La obra, que ha recibido una de las becas de Medio Ambiente de Caja Segovia, se complementa con una introducción al cicloturismo, explicando la equipación necesaria para realizar una ruta, la alimentación más conveniente e, incluso, algunas nociones de mecánica, por si durante el trayecto se produce el siempre temido pinchazo.