En un arranque de año de color blanco —el de la nieve—, el Ayuntamiento de El Espinar ha estado “bastante ocupado” en cuestiones de vialidad invernal. Sin embargo, ello no ha impedido a su alcaldesa, Alicia Palomo, sacar tiempo para preparar los Presupuestos de 2018.
—¿Para cuándo estarán las cuentas de este año?
—En 15 ó 20 días los Presupuestos estarán listos para someterlos a pleno. Ya hemos celebrado cuatro comisiones de Hacienda. A lo largo de esta legislatura, en la elaboración de los Presupuestos han participado los grupos políticos, y esta vez no va a ser diferente. No habrá problema en admitir propuestas de otros grupos siempre y cuando redunden en beneficio de todo el municipio.
—¿Nos puede avanzar las líneas básicas de los Presupuestos?
— Yo les he denominado ‘los Presupuestos del agua’. La tremenda sequía que hemos padecido nos debe hacer reflexionar, y aunque el documento final no está acabado, sí puedo avanzar que habrá una partida muy importante para mejorar la red de suministro de agua y los depósitos de distribución. En los Presupuestos se apreciará con claridad la política del Ayuntamiento sobre el agua…
— ¿En qué situación se encuentra ahora el embalse de El Tejo, tras las últimas nevadas?
— En cuanto a reservas de agua, no tenemos ningún problema. El Tejo está al máximo de su capacidad. De hecho, estamos soltando agua. En cuanto a la infraestructura en sí, siguen existiendo problemas. El Tejo es insuficiente para garantizarnos reservas de agua si nos encontramos con una primavera o un verano seco. Y además continúa con fugas… Sobre este último punto, no hay ninguna novedad. No hay respuesta de la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD), que es el organismo competente en esta materia. Eso no significa que no estemos reclamando un día sí y otro también.
—¿Alguna novedad en lo referente a la travesía de San Rafael?
— Nuestra visión sigue siendo la misma, aunque con más hartazgo, pues pasa el tiempo y no se da una solución por parte de la administración competente, que es el Ministerio de Fomento. Es verdad que dimos un ultimátum de tres meses, porque se nos garantizó, por parte de la Consejería de Fomento y el Ministerio de Fomento que en ese plazo se desviaría el tráfico de la travesía. Pero eso al final no ha sido así… El viernes tuvimos una reunión en el Ayuntamiento, con un colectivo del municipio, y nos estamos planteando, desde el Ayuntamiento, convocar en las próximas semanas algún tipo de movilización. Veremos.
— A mayores, ahora hay un problema con los semáforos de la travesía…
— A perro flaco todo se le vuelven pulgas. A la situación de la travesía ya conocida por todos, que supone un sinvivir diario para los vecinos, se ha unido una avería en todos los semáforos. Es un problema que dura ya dos semanas, y aunque desde la Jefatura Provincial de Tráfico me dicen que las obras se van a acometer a partir del lunes es posible que estemos otras dos o tres semanas en esta situación.
—¿Cómo se está, pues, a fecha de hoy, en este asunto?
— Tenemos los semáforos en ámbar, generando una situación de inseguridad tanto para los peatones que tienen que cruzar constantemente esa arteria principal de San Rafael como para los vehículos, especialmente en un punto crítico, el de la intersección de la travesía con la carretera 603. Estamos sin regulación semafórica y hemos pedido a la Jefatura Provincial de Tráfico, un refuerzo con patrullas, para poder regular esta situación, pero tampoco estamos viendo una respuesta importante en ese sentido.
— Cambiando de tercio, ¿hay avances en ‘Las Campanillas’?
— Sí. Avanza el proyecto. Se está ultimando la redacción del proyecto, y en los próximos días me reúno con el consejero de Fomento de la Junta para fijar la fecha del convenio.
— Por otra parte, ¿cómo está funcionando la Fábrica de Maderas?
—Bien. Hubo una licitación y se adjudicó a una empresa. Ahora hay allí una actividad vinculada al sector de la madera, y funcionando con total normalidad, que era lo que queríamos.
