El título es atractivo, casi intrigante, pero responde muy bien al contenido de la exposición que anuncia. Está abierta en el Museo Rodera-Robles y se ha instalado como actividad entre las programadas para la celebración, este año, del primer centenario de la fundación de la Universidad Popular Segoviana, de la que es heredera directa la actual Real Academia de Historia y Arte de San Quirce.
La muestra fotográfica presenta numerosos y muy curiosos documentos gráficos, en gran formato, de hechos acaecidos entre 1901 y 1936 y que pertenecen al archivo del diario ABC y a la familia Rincón. A los visitantes, en buen número desconocedores directos de aquellos años, no deja de sorprender los interesantes contenidos, como por ejemplo a los profesionales del periodismo nos llama la atención una fotografía de un acto cultural organizado por la primitiva Asociación de la Prensa, de vida efímera, y que se desarrolló en el desaparecido teatro Miñón. A aquel primer intento de asociación siguió una nueva iniciativa que pusimos en marcha en 1964, y que continúa en sentido ascendente, hoy con más de un centenar de profesionales afiliados. Pero, ya en este terreno personal, encuentro en la muestra una referencia a un libro de Eugenio Colorado y Laca, “Segovia”, del que conservo un ejemplar con una autógrafa dedicatoria del editor, el entonces famoso impresor Antonio San Martín, a un hermano de mi padre que dicho editor tuvo como oficial en su imprenta. En la página de la dedicatoria hay un sello estampado que dice: “Gran Medalla de Plata en la Exposición Hispano-Francesa de Zaragoza. 1908”. Y en relación con este logro publicaba este diario el 29 de agosto de dicho 1908 una noticia anunciando que el editor “ha remitido con destino a la Biblioteca Popular, establecida en la Sociedad Económica Segoviana, un lujoso ejemplar de la interesante obra “Segovia”, por él editada y escrita por el distinguido oficial de Artillería, d. Eugenio Colorado y Laca”.
Es muy probable, pues, que esta exposición también haya proporcionado evocaciones y recuerdos directos a algunos de los visitantes que ya han pasado por ella o que puedan pasar en días sucesivos.
En un librito escrito poco antes de su fallecimiento por el académico Juan de Vera, y completado el texto por su esposa, también académica, Manuela Villalpando (1980), con datos históricos sobre la todavía Academia de Historia y Arte (el título de Real le concedió Don Juan Carlos en junio de 1997), el texto de los estatutos y relación de académicos en aquel momento, contaba así el nacimiento de la Universidad: “En los últimos meses del año 1919, un grupo de estudiosos segovianos o que, sin serlo, eran amantes de Segovia, en su mayoría profesores de los Centros de Enseñanza, dieron en reunirse, dejando las tertulias de los cafés donde venían haciéndolo, en algún lugar propio, al objeto de cambiar impresiones sobre asuntos relacionados con el arte, la historia y la poesía y discutir sobre nuevos descubrimientos, producto de la investigación en archivos, lo que culminó en la creación, en 21 de noviembre de 1919, de un “Centro de Estudios” que nació para la historia local con la denominación de “Junta o Universidad Popular Segoviana”.
Una amplia información publicaba en primera página “El Adelantado”, el 30 de mayo de 1920, con el título “Inauguración de la Universidad Popular Segoviana, y daba cuenta de que se había inaugurado una nueva sede gracias al “nuevo impulso, algo romántico, pleno de espiritual elevación, que la Junta de profesores ha realizado al adquirir un viejo, románico templo en ruinas, que se esconde en clásico rincón segoviano, y restaurarle con destino a los fines culturales de la institución”. Se refería, claro está, a la actual sede de la Real Academia, la románica ex iglesia de San Quirce.
