La aventura coreana del sudafricano Oscar Pistorius, que entró en la historia al ser el primer discapacitado que compite en unos Mundiales absolutos, terminó ayer en las semifinales de los 400 metros.
Pistorius necesitaba llegar en uno de los dos primeros puestos de su serie para acceder a la final o acreditar uno de los dos mejores tiempos entre los perdedores, pero su octavo y último puesto, con una marca de 46.19, le dejó fuera del torneo.
En la final de los 110 metros vallas, el cubano Dayron Robles, que había ganado con un tiempo de 13.14, fue descalificado por obstruir al chino Liu Xiang. La delegación asiática presentó una reclamación y el oro fue a parar al estadounidense Jason Richardson, la plata para Xiang y el bronce para el británico Andrew Turner.
Por otro lado, el jamaicano Usain Bolt, eliminado por una salida falsa en la final de los 100 metros, manifestó ayer su intención de «seguir adelante» y aseguró que está «concentrado» en los 200.
«Estoy extremadamente decepcionado por no haber tenido la oportunidad de defender mi título por culpa de una salida falsa, pero no se puede vivir en el pasado».
En la delegación nacional, Mario Pestano disputará hoy la final de disco. El tinerfeño envió el artefacto a 65,13 metros en su primer lanzamiento. «Menos mal que me salió un buen tiro. Ahora no quiero hablar del podio, me bastará con salir satisfecho, como salgo ahora», declaró Pestano, cuyo mejor resultado en un Mundial fue el octavo puesto de París 2003.
Por último, Igor Bychkov, primer español que intervenía en una final de pértiga, fue el primero en despedirse del concurso al realizar tres nulos sobre 5,50.
