Un frente del Atlántico Norte tomó por sorpresa a España la segunda semana de noviembre, echando abajo las temperaturas y prácticamente acabando con el otoño más de un mes antes del equinoccio de invierno, el 21 de diciembre, que es cuando oficialmente comienza la estación más fría del año.
Es muy probable que este anticipo de temperaturas bajas y heladas haya sorprendido a más de uno de nosotros, que había dejado la revisión y reparación del aislamiento de la vivienda para principios de diciembre, y como advierte la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), ahora estamos haciéndolo de forma apresurada, con posibilidad de cometer más de un error.
Contratar una empresa o hacerlo nosotros mismos
Se calcula que al menos la mitad de las viviendas en España poseen un aislamiento defectuoso, al que no se presta la debida atención hasta que se presentan los tres meses de invierno, que en esta ocasión van a ser cuatro, aparentemente.
Como recuerda la OCU, un mal aislamiento tiene como consecuencia directa un mayor gasto energético en calefacción, lo que a su vez se ve reflejado en aumentos sustanciales en la factura de la electricidad o del gas, y a veces en ambas, cuando la calefacción central no es suficiente.
Contratar una empresa para aislar de manera correcta nuestra casa puede llegar a costar alrededor de 11.000 euros, pero se trata de una inversión que vale la pena, pues podemos ahorrar en el pago de energía y en sobrecoste por aislamiento deficiente hasta 1.000 euros anuales con un trabajo bien hecho.
Para ahorrar costes, muchos propietarios o inquilinos deciden hacer el aislamiento por su cuenta, lo que conlleva algunos riesgos y cometer errores que pueden afectar la seguridad de la casa y hasta hacerla inhabitable.
Los errores más comunes al aislar una vivienda, según la OCU
De acuerdo con laOCU, hay 5 errores que se cometen con frecuencia cuando se emprende una reforma de esta clase por cuenta propia, o utilizando una empresa muy económica, pero sin referencias.
Y este es justamente el primer error, cuando en vez de hacerlo por nuestra cuenta o de contratar una empresa que ofrece un presupuesto más alto, pero más ajustado a la realidad, escogemos una opción más económica pero que puede terminar haciendo un trabajo poco fiable.
Si vamos a contratar una empresa, debemos asegurarnos de que tenga buenas referencias, y de que haga un buen trabajo aunque debamos pagar un poco más.
Si hemos decidido hacer la reforma nosotros, debemos recordar que cualquier cierre que hagamos va a modificar el modo como se comporta la circulación del aire en nuestra vivienda.
Otro error muy frecuente al sellar todos los espacios es cubrir materiales o equipos eléctricos, como cables, bordes de lámparas o ventiladores de techo, cajas de fusibles, etc. Los equipos eléctricos tienden a calentarse y el material aislante puede ser combustible para un fuego accidental.
Si tenemos un desván o una buhardilla, es probable que decidamos cubrir el piso con material aislante, para evitar que el calor de la casa escape por las rendijas. Si hacemos esto debemos evitar colocar encima cajas u objetos pesados, pues vamos a interrumpir el paso del aire y a propiciar la aparición de humedad y moho.
Algo similar puede suceder con el sótano si lo aislamos de manera que no haya una buena aireación. Al sellarlo por completo, el aire se estancará y se puede viciar fácilmente.
Por último, otro error muy frecuente es sellar encima de paredes húmedas. Si sellamos un punto donde existe una filtración no estaremos solucionando el problema, solo ocultándolo, y tras la capa continuará creciendo, hasta ser mucho más grave.
