Ser Ciudad Europea del Deporte 2025 es sin duda una apuesta que ilusiona profundamente y que ya es trascendente para nuestra ciudad.
Nuestros olímpicos abanderan la candidatura en sus primeros pasos en una propuesta que avalan abiertamente jugadores, entrenadores, gestores, árbitros y clubes. Profesionales del deporte que ya exportan talento fuera de nuestra provincia consiguiendo méritos nacionales e internacionales en disciplinas como ciclismo, pádel, trial, taekwondo, esgrima, tenis de mesa, kickboxing, atletismo, piragüismo, balonmano, fútbol sala, voleibol, baloncesto…mucho talento segoviano unido para impulsar la marca Segovia hacia un reto exigente liderado por el Ayuntamiento de Segovia.
Ahora es el impulso de la Segovia deportiva en manos de la base y de las iniciativas, en manos de las escuelas, los clubes y el apoyo de las diferentes federaciones y municipios que seguro multiplicarán para la ciudad de Segovia. La candidatura es una buena excusa para crear esas mesas de trabajo necesarias que fomentan el orgullo de pertenencia, el compromiso por un objetivo común, la experiencia y la representación de todos.
El reto es alcanzable a pesar de que pugnamos con ciudades relevantes como son, entre otras, Alcobendas o la vizcaína Santurtzi. Habrá que trabajar para proyectar volumen de disciplinas deportivas y práctica de las mismas, visibilizar espacios y presentar un proyecto inclusivo y dinamizador.
Si en el camino del objetivo conseguimos implementar instalaciones, incrementar tiempo activo de deporte en un volumen que supere el 55% de la población, visibilizar la capacidad de atraer talento y eventos trascendentes a la par que dinamizar juegos escolares y provinciales como ya hacemos, o destacar la apuesta para llevar la práctica de la ciudad al entorno rural en iniciativas que se consoliden, Segovia habrá ganado.
