La catedral de Segovia ofrecerá al público un nuevo atractivo a los turistas y visitantes con la apertura al público del ansiado museo catedralicio, que tras años de distintos avatares por fin verá la luz en la primera semana del próximo mes de julio. El Cabildo Catedral ha decidido apostar fuerte por este proyecto que culminará la oferta expositiva del templo y que servirá para poner en valor algunas de las obras más importantes que atesora en sus capillas, dotándoles de un espacio adecuado para su exposición.
El deán de la Catedral José Antonio Velasco confía en que los plazos previstos por la dirección de las obras, a cargo del arquitecto responsable del Plan Director de restauración del templo Juan Carlos Arnuncio, se cumplan conforme a lo establecido, ya que poder contar con una nueva sala expositiva al público para el verano sería un acicate importante de cara a incrementar el número de visitantes.
Así, indicó que las obras están en la actualidad en un proceso “crítico” en cuanto a su desarrollo, con la instalación de los sistemas de climatización e iluminación que garantizarán no sólo la adecuada conservación de las piezas, sino también la comodidad de los visitantes. Además, la dirección de la obra ha decidido incluir otros detalles no previstos en el proyecto inicial, como la instalación de unos aseos “que consideramos necesarios para ofrecer la mejor atención posible a quienes nos visiten”.
Las obras se han realizado tomando como referencia el proyecto de musealización del espacio, que ha sido desarrollado por José Angel Rivera, sacerdote experto en teología e historia del arte que ha preparado varias de las exposiciones de Las Edades del Hombre, y que ha seleccionado junto con el Cabildo las 37 obras que inicialmente formarán parte del museo.
La ‘estrella’ del museo será el ‘Triptico del descendimiento’ de Ambrosius Benson, una de las piezas más valiosas de las que se conservan en la Catedral y que será trasladada desde su actual ubicación para ser instalada en la sala que quedará como colofón final de la muestra. Además del ‘Benson’, el museo contará con una serie de obras pictóricas en su mayoría que en la actualidad están diseminadas por varias de las capillas de la catedral y que han sido consideradas con la entidad religiosa y artística suficiente para ocupar este nuevo espacio expositivo.
“Hay piezas que no están hechas para el culto, pero que expresan belleza y sentimiento –explicó Velasco- y queremos que el público pueda disfrutar de su expresión y su sugerencia religiosa cristiana en un marco más adecuado”.
El acceso al museo se realizará a través del claustro, donde se ha habilitado una escalera al piso inferior, y la accesibilidad de las personas con minusvalía se realizará a través de la entrada por la calle San Geroteo, acompañadas por guías del templo.
El esfuerzo económico para desarrollar este proyecto, con un presupuesto de 384.000 euros, ha hecho al Cabildo poner sobre la mesa la necesidad de elevar el precio de la entrada a la catedral, una decisión que no será adoptada hasta finales de año. Sobre este asunto, el deán aseguró que la apertura del museo llevará aparejada la contratación de “una o dos personas”, así como elevar los gastos de limpieza y mantenimiento generales del templo, por lo que “no quedará más remedio que replantearnos una subida en el precio de la entrada, aunque sin perder de vista el objetivo inicial de que la catedral sea un espacio de todos, y para disfrutar del arte y del sentimiento religioso que nos acerque a Dios”.
