El Papa aseveró que no se debe confundir “la compasión hacia los animales, que exagera el interés hacia ellos, mientras deja indiferente el sufrimiento del prójimo” durante la audiencia Jubilar que presidió ayer en la plaza de San Pedro. Durante la catequesis, Francisco aseguró que uno de los aspectos de la misericordia consiste en “apiadarse de los que sufren” y manifestó que la piedad es la expresión práctica de la misericordia de Dios.
En este sentido, explicó que la “pietas” es un concepto que, en el mundo greco-romano, indicaba la “devoción debida a los dioses”, así como el “respeto de los hijos hacia sus padres”. Así, pidió a los fieles que estén atentos “a no confundir la piedad con el pietismo, que consiste solo en una emoción superficial, que no se preocupa del otro”. “La piedad verdadera es manifestación de la misericordia de Dios y uno de los siete dones del Espíritu Santo, que el Señor da a sus discípulos para que sean dóciles y sigan sus inspiraciones divinas”, aseguró el Papa.
Por otro lado, hizo hincapié en la actitud que Jesús tenía hacia los marginados de la sociedad a los que “respondía con la mirada de la misericordia” y con el “consuelo de su presencia”. Finalmente, exhortó a los fieles a “apiadarse y compadecerse amorosamente del prójimo” y a que no se dejen seducir por la “esclavitud de las cosas materiales”.
Por otro lado, el Papa anunció el viernes que visitará durante su viaje a Armenia el memorial de Tzitzernakaberd, el monumento dedicado a víctimas del genocidio armenio desde 1915 hasta alrededor de 1922 a manos de los turcos-otomanos. El decimocuarto viaje apostólico internacional del pontífice argentino comenzará el 24 de junio y concluirá el 26 de junio y está previsto que visite además de la capital armenia, Erevan, la ciudad de Gyumri.
El Papa será recibido por las autoridades del país en el aeropuerto Ereván e irá a rezar a la catedral de Echmiadzín para trasladarse después al palacio presidencial donde tendrá lugar la visita de cortesía al presidente de Armenia, Serzh Sargsyan. La cita más importante del viaje cuando Francisco se acerque hasta el memorial Tzitzernakaberd, que recuerda a las víctimas del genocidio armenio. El año pasado el Pontífice dedicó una misa por los 100 años de la masacre del pueblo armenio y habló del “exterminio” armenio como el “primer genocidio del siglo XX”. Este gesto tensó las relaciones diplomáticas de la Santa Sede con Turquía que nunca reconoció el genocidio.
Por la tarde, el Papa celebrará una misa en la plaza Vartanants de la ciudad de Gyumri y después visitará la catedral apostólica de las Siete Llagas.
