La Gimnástica Segoviana espera convertir su vía crucis de la primera vuelta, un tramo de cinco derrotas seguidas en el que no marcó ningún gol, como espejo para renacer en la segunda vuelta. Es la filosofía de su entrenador, Manu González. “Ahora es donde tenemos que ponernos las pilas. Hay que sacar renta: puntitos. Tenemos que ir a muerte a por esos partidos, no tenemos nada que perder. Cero presión; la teníamos más ante el Salamanca que el domingo en Pasarón ante el Pontevedra. Hay que ir sin ningún tipo de complejos; a muerte a por ellos, a ganarlos, porque todo lo que saquemos positivo es una renta que no hemos conseguido en la primera vuelta. Sumar, sumar, sumar”. Tras el Pontevedra, segundo, vienen Compostela, cuarto; Móstoles, noveno; Leganés B, octavo, y Bergantiños, quinto. Después, el equipo decidirá su suerte en un último mes con duelos directos ante Arenteiro, Llanera o Marino de Luanco.
Es una reacción que necesita un equipo que ha caído al cuarto puesto por la cola; los cinco últimos descienden de forma directa y el sexto juega una eliminatoria por evitarlo. La salvación está a dos puntos, pero ya hay tres equipos por delante para alcanzarla y un cuarto, el Llanera, igualado a puntos. Las dos últimas jornadas eran propicias para coger aire, pero las citas ante los dos últimos –Ceares y Salamanca UDS– apenas han deparado dos empates, dos menos que los cuatro que sumó la Segoviana en la primera vuelta. “Hemos perdido una gran oportunidad, se nos han escapado cuatro puntos que estábamos capacitados para conseguir”.
El empate del domingo dejó cabizbajo al vestuario. “Era un derbi, lo habíamos considerado una final y lo teníamos marcado en el calendario”. En su análisis de la situación, González ve la botella medio llena. “Creo que hemos encontrado la solidez defensiva en 2022. ¿No lo hemos ganado? Pues bueno. Por lo menos ahora estamos viendo a una Segoviana que no pierde esos partidos que sí perdía en la primera vuelta”. Pero no esconde las carencias. “Obviamente hay cosas que mejorar; si no, no estaríamos abajo. Lo que tenemos que hacer es trabajar para generar más ocasiones”.
También asumió una cierta alergia a tirar a puerta. “A veces la gente se impacienta con razón cuando ve que Juanito (De la Mata) tiene un tiro franco al borde del área e intenta dar un pase más. Estoy de acuerdo, creo que tenemos que intentar mejorar en ese aspecto, asumo esa responsabilidad”. Puso en valor a jugadores como Conde,” que cada vez que le llega el balón no se lo piensa”, o Nanclares. “A Juanito, Nogue o Cido a lo mejor les cuesta un poco más. Hay que insistirles para que golpeen a portería porque pueden pasar muchas cosas”. Algo que también ayuda a la defensa. “A veces no acabamos las jugadas y nos corren a la contra por no hacerlo”.
Quizás esa presión, buscar la cuadratura del círculo, sea la gran merma azulgrana. Cuando no hay confianza en el disparo, la alternativa es perfeccionar todos los pases anteriores. Ante los rivales directos, la Segoviana se exige perfección; quizás ante los grandes pueda quitarse el miedo y apretar el gatillo.
“Si pisamos más el área, pitarán penaltis”
Manu González se mostró crítico con los árbitros, pero también con el poco tráfico que sus pupilos generan. Argumentó que el empate del domingo dejó un gol legal anulado y un penalti no pitado sobre Borrego. Se une a la roja a Javi Marcos en Arosa. “Es evidente que no estamos teniendo suerte, pero nosotros no podemos controlar ese factor. Es cierto que siempre nos tocan árbitros jovencitos o del norte. Habrá un día que…”
Hasta que llegue ese día de compensación, el técnico analiza: “Cuando vas a un campo de un equipo de mucha entidad o que pisa mucho el área es más fácil pitar penaltis, yo lo entiendo. Si no hemos pisado el área más que cinco veces y en una hay dudas, a lo mejor no se pita por eso. No me voy a fijar en si hay respeto, si miran el escudo, cuánta gente viene al campo o si aprietan. Lo que hay que hacer es seguir probando, pisar más veces el área. Vamos a mirarnos el ombligo. Una cosa es que no nos piten un penalti y otra es que no pisemos el área 15 veces. Seguro que así, uno nos pitan”.
