El español Rafa Nadal no falló a su cita y se clasificó para la gran final de Roland Garros después de derrotar al escocés Andy Murray en tres duras y disputadas mangas por 6-4, 7-5 y 6-4, tras casi tres horas y media de batalla.
No fue seguramente la mejor versión del manacorí, que se regaló por su vigesimoquinto cumpleaños la posibilidad de pelear por su sexto entorchado en París, lo que le permitiría poder igualar al sueco Bjorn Borg. El viento marcó el encuentro para ambos jugadores, que ofrecieron demasiadas concesiones a su rival, algo que favoreció al todavía número uno del mundo, mucho más certero en las ocasiones claves.
De todos modos, resolvió siempre con solidez los apuros en los que se encontró en un duelo lleno de alternativas, y donde casi siempre llevó la delantera. Nadal fue más incisivo en las opciones de rotura, y cada vez que rompió fue para coger la delantera, todo lo contrario que Murray, que fue a remolque y al que los largos peloteos y el esfuerzo le pasaron factura.
El mallorquín ha ido mejorando paulatinamente su tenis a lo largo del torneo. La victoria ante Soderling debía ser un trampolín para afrontar al escocés, muy agresivo para intentar controlar a su rival, pero al que le falló el saque.
Pero Nadal salió centrado y no desaprovechó sus ocasiones para situarse 5-1 arriba. Parecía que la manga estaba encarrilada, pero se despistó y permitió que el escocés se metiese en el encuentro y que incluso tuviese una bola de rotura con el balear sacando para ganar.
El pentacampeón del torneo salió adelante y pudo cerrar el parcial por 6-4. El cuarto favorito no se descentró y Nadal tuvo que seguir peleando para salvar sus saques, aunque impuso su mejor tenis para romper en el quinto juego, momento en el que se entró un carrusel de roturas que hicieron pensar en una ‘muerte súbita’, situación que evitó el español (7-5).
Murray, lastrado por su gran cantidad de errores forzados (40) y por el desgaste de aguantar largos intercambios, hizo amago de irse del partido entonces. El balear rompió a las primeras de cambio, pero continuó sufriendo con su servicio, recuperándose ante todos los problemas con golpes geniales y agresivos, tanto con el ‘drive’ como con el revés a dos manos, a buen nivel en esta ocasión.
El tenista español, viendo cerca nuevamente el último domingo en la capital francesa, se agarró a la pista y sacó sus credenciales para mantener su ventaja y volver a saborear una final en París, y la duodécima en un ‘Grand Slam’.
Derrota de Djokovic
El rival de Nadal será el suizo Roger Federer, que consiguió el pase para la final después de derrotar en un intenso encuentro (7-6, 6-3, 3-6 y 7-6) al serbio Novak Djokovic.
El helvético cortó la racha de la segunda raqueta del mundo, que acumulaba 43 victorias desde el inicio del curso, habiendo ganado todos los encuentros que ha disputado. Sin embargo, ‘Nole’ no pudo con el ganador de 2009 en la capital gala y acabó sucumbiendo en más de tres horas y media, por lo que Nadal deberá doblegar a Federer para levantar su sexto título de Roland Garros.
