Rafa Nadal se clasificó para la final del torneo de Hamburgo (Alemania), que se disputa sobre tierra batida, después de vencer con comodidad al tenista italiano Andreas Seppi (6-1, 6-2), cuarto cabeza de serie del torneo, en un encuentro en el que el mallorquín recuperó sus buenas sensaciones, que le permitieron acceder a la final alemana siete años después.
El balear, que a pesar de las dudas mostradas en los dos primeros encuentros del torneo —ante el español Fernando Verdasco y el checo Jiri Vesely—, confirmó en semifinales ante el italiano las buenas sensaciones que ya demostró recuperar ante el uruguayo Pablo Cuevas el viernes, al que venció con comodidad para citarse con Seppi.
El español, primer cabeza de serie en el torneo, comenzó activo desde el arranque, firmando un primer set inapelable que se adjudicó en 30 minutos, en el que rompió los tres primeros servicios de Seppi y se puso 5-0 en el marcador. Sin embargo, el italiano, número 26 del ranking ATP, no quiso rendirse y recuperó uno de los tres ‘breaks’ perdidos, consiguiendo sumar su primer juego del partido.
El exnúmero uno del mundo se mostró muy sólido y firme en la arcilla de Hamburgo, en la que buscó y alcanzó su cuarta final de este año tras las firmadas en Buenos Aires, Madrid y Stuttgart, así como la final número 96 de su carrera.
Ya en la segunda manga, el italiano pareció animarse. Pero Nadal continuó como a él más le gusta, con un nuevo quiebre al primer servicio de un Seppi que estuvo lastrado con esta faceta del juego durante todo el partido.
Cuando mejor parecían marchar las cosas, el jugador manacorí asustó a la grada al detener el partido por molestias en la zona abdominal, pero el parón se quedó en eso, en un susto, porque el español regresó a la pista para solucionar el tercer juego sin agobios, ayudado también por cuatro errores no forzados seguidos del italiano.
56 minutos después de comenzar el encuentro, Seppi aguantó por primera vez su saque y se estrenó con el servicio, pero aún así, el italiano, totalmente entregado, no puso apenas resistencia y el balear, que desaprovechó su primera ocasión de certificar la victoria en el séptimo juego, no lo alargó más y se hizo con la semifinal en una hora y 20 minutos de juego.
Así las cosas, el número 10 del mundo se enfrentará este domingo en la final de Hamburgo al también italiano Fabio Fognini, que derrotó (6-2, 7-6[2]) en dos mangas al francés Lucas Pouille en la otra semifinal disputada ayer.
