Después del silencio que ha protagonizado desde que se conociera la noticia de la imputación de Francisco Camps en el caso Gürtel, el líder del PP, Mariano Rajoy, volvió a la palestra y expresó ayer el «pleno, total y absoluto apoyo del partido» al presidente de la Generalitat valenciana y al secretario general de los populares de esta región, Ricardo Costa, ambos citados a declarar en esta investigación.
Rajoy manifestó, además, su «confianza» en ambos dirigentes.
A la pregunta de si había hablado con el mandatario autonómico últimamente, el jefe de Génova confirmó que lo había hecho «muchísimas veces en los últimos días» y añadió que tiene la «total certeza» de que dice la verdad, y así «lo aclarará con el juez la próxima semana».
Rajoy hizo hincapié en el «respaldo absoluto al señor Camps» y se mostró «totalmente convencido» de que esta situación «se va a terminar pronto». Asimismo, agregó que ambos están deseando llegar ante el magistrado «y que esto acabe» porque, en su opinión, todo lo sucedido en los últimos días se está convirtiendo en un juicio en los medios de comunicación, que «no es el verdadero».
El líder popular recalcó que conoce a Camps desde hace muchos años, sabe cómo vive, «quién es y qué ha hecho y, desde luego, en este partido todos respaldamos al presidente y estamos convencido de su inocencia».
Por su parte, el protagonista de los hechos aseguró ayer que «nada puede parar, ni lo más complejo», al PP ante las elecciones europeas, en un mitin de su partido en Valencia en el que reclamó una campaña «limpia y digna» frente a las insidias que utilizan otros partidos.
Camps realizó estas declaraciones en un acto electoral popular en el que inicialmente no estaba previsto que acudiera, aunque se presentó por sorpresa en el Palau de la Música con gritos de «presidente» lanzados por el público que llenaba la sala.
El responsable de la Generalitat valenciana, que está citado a declarar el martes en relación con el caso Gürtel, afirmó que su formación trabaja para hacer de los comicios «un proceso democrático» mientras que sus oponentes «hacen de la insidia el único camino posible».
También dio las gracias a la gente «que hace posible que la campaña sea limpia y digna» y a los que creen «en la democracia y en el discurso legítimo», ya que, «ése es le discurso del PP».
Por su parte, el secretario general del PPCV, Ricardo Costa, también imputado en la trama de corrupción, indicó que aprecia «las señales de cariño» que se les ha mostrado tanto a él como a Camps durante las últimas semanas.
Así, afirmó que la oposición «no va a poder» con el PP, porque tienen «las manos limpias y al mejor presidente» y añadió que «vayan contra quien vayan» sus rivales, los votantes de su partido están «ahí siempre» y recalcó que «el corazón popular está «más unido que nunca».
