La Guardia Civil ha rescató ayer el cadáver de un montañero de 49 años, vecino de León, fallecido por un traumatismo craneoencefálico, posiblemente por la caída de piedras o bloques de hielo que le partieron el casco, en el pico Curavacas, en la Montaña Palentina.
El cadáver de montañero estaba a unos 2.000 metros de altura en el corredor sur del pico Curavacas. La voz de alarma se dio sobre las 19:30 horas del domingo.
La voz de alarma se dio sobre las 19:30 horas del domingo cuando el montañero, vecino de la provincia de León, no había regresado y su teléfono móvil daba señal en la misma ubicación desde hacía cinco horas.
Inmediatamente se envió a tres especialistas de montaña de León, que subieron a pie hasta el lugar donde indicaban las coordenadas facilitadas, a unos 2.000 metros de altitud y en unas condiciones muy adversas, con abundante nieve, fuerte viento y temperaturas extremas.
Sobre las 23:45 horas localizaron el cadáver del montañero y procedieron a su evacuación por las laderas de nieve mientras esperaban la llegada de otros dos especialistas de montaña, para el apoyo en el porteo de la camilla.
A las 4:45 horas de la madrugada lograron llegar al vehículo oficial en el que trasladaron el cadáver hasta la localidad de vidrieros (Palencia), donde esperaban los servicios funerarios.
Según la información facilitada, el montañero fallecido presentaba un traumatismo craneoencefálico producido por una posible caída de piedras o bloques de hielo que le partieron el casco.
