La Gimnástica repitió el mismo resultado que el domingo ante el Palencia, empatando anoche a un gol frente al Zamora, pero mejorando su imagen con respecto al pasado encuentro.
La Segoviana partió con un once en el que Jesús Alonso y Víctor Pérez jugaron en los laterales, Anel y Álex en el centro de la defensa; Roberto y Ricardo como mediocentros; Dani Cara y Cajoto de extremos; Pino de mediapunta; y Terleira en la punta de ataque.
Los locales sacaron de centro y realizaron un juego vertical desde el principio. Así, si a la primera vez que llegaron al área de Sergio Sánchez el balón se marchó por la línea de fondo, a la segunda ocasión los segovianos no perdonaron y, por medio de una gran jugada de Ricardo por la derecha con un excelente centro al área, llegó el 1-0 tras un espectacular remate de Pino, que se tiró en plancha y remató a gol de cabeza.
Pero poco tardaron los zamoranos en igualar la situación. A pesar de que la pelota pertenecía a los de casa, en el primer ataque de los visitantes la defensa gimnástica tiró mal el fuera de juego y el máximo goleador del Zamora, Jona, colándose solo por la derecha, batió a Iván en el mano a mano con un remate raso y pegado al palo.
A continuación el autor del tanto del empate supuso más de un quebradero de cabeza para los de Paco Maroto, ya que disfrutó de un par de oportunidades más, una al remate de un corner; y otra con un tiro desde la frontal que no fue tapado por la defensa segoviana, pero que por fortuna para los de casa se marchó alto. Tras este inicio tan movido, la cosa se calmó un poco, igualándose algo más la posesión y con la Gimnástica intentándolo por la derecha y tocando con paciencia, si bien alguna pérdida en el centro del campo le puso en aprietos.
Así pues, pasados los 20 minutos la intensidad bajó bastante, y el Zamora se mantuvo un poco a la expectativa esperando atrás a medio campo, si bien cuando llegaba al las inmediaciones del área contraria lo hacía con cierto peligro, como con el tiro de Miguel Santos, que se marchó alto por muy poco.
Llegada la media hora la igualdad continuaba en el marcador, pero la posesión seguía siendo de los azulgranas, que fueron los únicos dispuestos a poner algo de carne en el asador. Y es que los visitantes, muy cerrados, parecían conformarse con el empate.
Por su parte, a los locales no se les acababa la paciencia. Y eso que no era fácil, teniendo en cuenta el planteamiento tan defensivo del Zamora. Pero la primera parte moría, y en los últimos minutos los de la ciudad del Duero adelantaron tímidamente las líneas, y así tuvieron la última ocasión para ellos, con una falta no muy lejana, que lanzó Marín alta. Así se llegó al descanso.
Tras el regreso de los vestuarios los zamoranos salieron algo más decididos, pero fueron los gimnásticos quienes crearon más ocasiones en los primeros cinco minutos, hasta cuatro, comenzando por las creadas por Pino y Dani Cara; y siguiendo por las dos más claras: una falta de Víctor Pérez que acabó en corner y un remate a bocajarro de Terleira desde el área pequeña, que se encontró con el cuerpo del portero.
Los azulgranas merecían marcar, por su insistencia y por sus ganas, con un Dani Cara muy atrevido y bien colocado. Pero la pólvora estaba algo mojada ayer anoche.
Por su parte, los zamoranos dispararon por primera vez a puerta en el minuto 13, pero Iván estuvo muy atento por bajo al tiro raso de Jairo Álvarez.
Pasada la hora de partido Paco Maroto hizo el primer cambio, sustituyendo a Pino por Mariano en la mediapunta.
El choque transcurría por los mismos derroteros que en la primera mitad, pero ahora el cansancio empezaba a notarse sobre los jugadores. A pesar de todo, Víctor Pérez volvió a disfrutar de una buena oportunidad a balón parado, con un lanzamiento de falta que pasó por encima de la barrera y encontró la buena parada del guardameta zamorano, estirándose a ras del suelo.
Seguidamente, Cajoto probó con un flojo disparo a las manos del portero, en una de las últimas ocasiones segovianas de un encuentro que acabó con reparto de puntos.
