Si hay algo que define a una democracia liberal (la menos imperfecta de las existentes en este mundo) frente a la democracia popular que siempre quiere el socialismo, es la división de poderes en: Legislativo, Ejecutivo, y Judicial. Pero con esta separación de poderes no es suficiente. Tiene que existir «un cuarto poder», el de libertad de prensa, y que recoge nuestra constitución del 78 en su Título I. De los derechos y deberes fundamentales; Capítulo segundo. Derechos y libertades; Sección 1.ª De los derechos fundamentales y de las libertades públicas. Artículo 20: 1.- Se reconocen y protegen los derechos: a) A expresar y difundir libremente los pensamientos, ideas y opiniones mediante la palabra, el escrito o cualquier otro medio de reproducción. 2.- El ejercicio de estos derechos no puede restringirse mediante ningún tipo de censura ni amenazas. Decía Thomas Jefferson que: «El precio de la libertad es la eterna vigilancia», y esa eterna vigilancia es la que ejerce la prensa libre, ese «cuarto poder». Algo que siempre ha pretendido eliminar el socialismo.
El Partido Socialista, es un hecho histórico, nunca se ha llevado bien con la libertad (lo primero que hizo Don Pablo Iglesias nada más entrar al Congreso de Diputados en 1910 fue amenazar al líder del Partido Conservador, Don Antonio Maura, con el atentado personal: «Hemos llegado al extremo de considerar que, antes que S. S. suba al Poder, debemos llegar hasta el atentado personal»), y menos con la de prensa libre. Desde su toma de poder irregular y sospechosa por unas elecciones municipales el 14 de abril de 1931, ordenó cerrar casi 300 medios de comunicación libres, entre periódicos, revistas, folletines, y demás medios escritos de comunicación («La Prensa en la Segunda República Española» Justino Sinova Garrido)
Leo ojiplático una noticia en la que los socialistas de Castilla y León de la sanchesfera (que no hace mucho paseaban orgullosos por Segovia a Koldo y Ábalos) denuncian un titular del Adelantado, atendiendo al «puto amo» (como lo califican ellos, sabiendo que un «puto amo» solo quiere «putos siervos») en su lucha contra los medios libres y la Justicia que no se dobla ante el «puto amo», cuando espeta: esto es «Es un punto y aparte, se lo garantizo», se vienen arriba y en su fina piel, dicen sentirse ofendiditos por un titular totalmente descriptivo de este nuestro periódico: «Tudanca evoca los crímenes del Nacionalsocialismo en un acto de desagravio político y moral celebrado en Segovia», en el que referencian a la noticia, y veo en una foto, que ilustra el momento, al Sr. Tudanca (que ni se nota, ni se mueve, ni traspasa) al que la sanchesfera tiene enfilado; al Sr. Aceves (que un día de estos cristalizará en adoquín, y que nadie como él ha hecho más el ridículo en una intervención en el Congreso), y a la Sra. Martín (la que pone las flores); denuncia que el PSOE ha ejecutado ante la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) porque el susodicho titular, dicen, «dejar entrever» que el Sr. Tudanca «apoya al régimen nazi»; saliéndose de ese «dejar entrever» el resto de los que aparecen en la foto, algo que no se entiende muy bien, pues, para todos es «dejar entrever» o no es para ninguno.
Ese «dejar entrever» reconozco que no deja claro la palabra que no han entendido del titular esa izquierda analfabeta funcional. ¿Será «Nacionalsocialismo»?; ¿será «acto»?; ¿será «desagravio»?; o ¿será «moral»? Porque «evoca» es bastante claro y explicito, incluso para ellos. Según la RAE en su primera acepción, evoca es: «Recordar algo o a alguien, o traerlos a la memoria», aunque hay que reconocer que ellos no lleguen a entenderlo ni a entreverlo. Seguro que cuando la FAPE resuelva les regalará el diccionario de la RAE con una sola página donde aparezca el significado de la palabra «evoca». Espero que no les condenen a escribir el significado 10 veces para que no entrevean, si no que vean, lean, y crean.
El ataque contra El Adelantado de Segovia de estos socialistas de «terrón» no es nuevo, no hace mucho el Sr. Aceves ya acusó a este periódico de censurarle sus peroratas semanales. Ahora haciéndose los ofendiditos vuelven a la carga de nuevo para intentar doblegar la libertad de expresión periodística. Si algún día llegasen dominar alguna institución provincial o autonómica intentaran la asfixia física de libertad expresión, y el Adelantado está en su punto de mira. Contra el totalitarismo solo cabe la resistencia, los socialistas siempre han sido los mayores enemigos de la libertad y la democracia.
Decía Edmund Burke que: «Lo único que necesita el mal para triunfar es que los hombres buenos no hagan nada». Desde esta atalaya de libertad, que debe ejerce su línea editorial en libertad, quiero mostrar todo mi apoyo a la libertad de expresión del Adelantado frente a la banda de la porrita que pretende someterlo a sus dictados o cerrarlo. Alguien dijo que: Primero vinieron a por los judíos, y no dije nada porque yo no era judío. Después vinieron a por mis vecinos, y no dije nada porque no los conocía. Después vinieron a por mi familia, y yo no dije nada por miedo. Luego vinieron por mí, y ya no quedaba nadie para ayudarme a mí.
Por eso, todos los que creemos en la libertad de expresión de los medios, y en este caso de El Adelantado, debemos de expresárselo de alguna manera y que sepan que estamos con ellos, y frente a los cozeros censores socialistas; bien escribiendo, llamándoles, o defendiéndoles allí donde un socialista justifique la censura de prensa libre.
José María Arévalo