Cuando el Benfica de Lisboa desafíe esta noche en reducto propio al todopoderoso Barcelona, en la segunda jornada de la fase de grupos de la ‘Champions’, Lionel Messi se estará enfrentando no solo a los portugueses, sino también a su ídolo de infancia, su compatriota Pablo Aimar.
El exvalencianista, que no jugó en el triunfo de su equipo del pasado viernes, debido a un traumatismo en la pierna derecha, está plenamente recuperado de su lesión, por lo que pudo volver ayer a los entrenamientos lusos y estará presente en el choque del Estadio da Luz.
La ‘Pulga’, de 25 años, seguramente, se alegrará por el que fuera también jugador del Zaragoza, de 32, a pesar de que el rival tendrá a un gran armador de juego. «Messi no habla mucho, pero siempre contó que le encantaba el fútbol de Aimar y que fue uno de los pocos futbolistas a los que le ha pedido la camiseta», recordó el exseleccionador argentino Sergio Batista, que dirigió al ariete azulgrana en el equipo albiceleste.
Para este duelo, el entrenador de las ‘águilas’, Jorge Jesús, abandonará muy probablemente su filosofía de juego ofensivo y reforzará el sector defensivo, porque está convencido «de que no se le puede jugar de igual a igual al once de Tito Vilanova». Aún así, el técnico luso subrayó que no se conformará con un empate en casa y buscará no «entrar en el juego» del rival.
El colíder del torneo portugués, que comparte el liderato con el Porto, logró en la primera jornada de la ‘Champions’ un punto en su visita al Celtic de Glasgow, con quien empató a cero.
Por su parte, el Barcelona llegó a Lisboa amparado por su impecable racha de resultados, que incluye seis triunfos seguidos en la Liga española y otra victoria en la jornada inicial en el torneo continental. Sin embargo, sufrió más de lo esperado para ganar 2-1 al Spartak de Moscú. Y es que, por el momento, el juego del equipo de Tito Vilanova no alcanzó las cotas de antaño, pero nadie podrá discutir su rentabilidad en el inicio del curso.
Así lo entiende Andoni Zubizarreta, director deportivo del club, quien antes de viajar a Lisboa manifestó que «si estamos mal ahora, el día que estemos bien iremos como un tiro».
Mientras, el técnico ‘culé’ recibió la buena noticia de las recuperaciones de Carlos Puyol, Andrés Iniesta y Adriano para partido ante el Benfica, después de que todos ellos superaran diferentes molestias. Es posible que el entrenador azulgrana dé minutos a esos futbolistas más necesitados con vistas también al encuentro del domingo ante el Real Madrid.
El ‘clásico’ de la Liga española podría determinar de alguna manera la alineación y quizá Vilanova guarde a alguna pieza con más minutos acumulados. Aunque el catalán negó ayer que su equipo ya piense solo en el choque del próximo domingo. «El partido importante es el del Benfica, el que está por delante, los otros, tiempo habrá de pensar en ellos», explicó. Además, subrayó que será «muy complicado» vencer al conjunto de Lisboa.
A pesar de que Portugal atraviesa una gran crisis económica con recesión y desempleo récord, y de que el Barcelona devolvió 2.000 entradas que no vendió, las gradas del estadio lisboeta estarán repletas de hinchas lusos. Para Record, uno de los principales periódicos deportivos de Portugal, es más que comprensible: es que habrá, según escribió el rotativo, «un rectángulo verde y dos dioses del fútbol». Messi y su ídolo Aimar.
