Primero fue la Unión Ciclista Internacional (UCI) la que puso en duda la limpieza de Alberto Contador. Después, el diario francés L’Equipe, que aprovecha la mínima ocasión para criticar, echó más leña al fuego, y ahora le toca al estadounidense The New York Times, que se ha subido al carro para desprestigiar al español.
El periódico publicó ayer que Contador habría dado positivo en un control antidopaje realizado el día anterior al conocido del clembuterol. En este caso, sería por un producto plastificante que apareció en una cantidad hasta ocho veces mayor de la permitida.
Según el rotativo, en la sangre del triple ganador del Tour se habrían encontrado restos plásticos en una cantidad mucho mayor de la que está permitida en el registro que se le practicó la víspera de la segunda jornada de descanso de la pasada edición de la ronda. La detección de dicha sustancia se habría conseguido gracias a un nuevo método empleado, por vez primera, en el pasado Tour de Francia, pero que aún no está homologado por la Unión Ciclista Internacional ni por la Agencia Mundial Antidopaje, con lo que los resultados no tienen validez alguna.
El jefe del laboratorio homologado por la AMA de Roma, Francesco Botre, indicó que «si alguien presenta un nivel alto de plastificantes en la orina, tiene muy difícil explicar cómo pudo ocurrir si no es con el propósito de doparse».
Según el periódico, la presencia de estos restos «podría significar que ha utilizado una transfusión sanguínea para mejorar su rendimiento», con lo que el corredor tendría que afrontar una sanción de hasta dos años.
Respecto a la posibilidad de la autotransfusión, tal y como apuntó días atrás L’Equipe, el español, que se considera uno de los «cuatro ó cinco deportistas más controlados del mundo», indicó que a él no le han informado de la presencia de esa sustancia.
«Tengo un pasaporte biológico y se me hacen muchos controles. Pero cuando eres un deportista y consigues objetivos difíciles la gente se pregunta multitud de cosas. Y cuando pasa esto, alguna prensa aprovecha para hacerse una publicidad grande», subrayó.
Tras conocer la noticia, Fran Contador, hermano y agente de Alberto Contador, respondió a las acusaciones. «Hay que partir de la base de que la UCI ya comunicó que el control dio resultado negativo. Así que todo lo que se diga es hablar por hablar, una invención».
«Es muy lastimoso para Alberto tener que defenderse de una infracción que no ha cometido y más topándonos con noticias sin fundamento. Parece que algunos medios quieren aprovecharse de su imagen pública».
El madrileño conoció la noticia poco después del mediodía y Fran Contador sospecha que no será la última: «No me sorprendería que saliera cualquier tipo de barbaridad en los próximos días».
Por otro lado, Óscar Pereiro, ganador del Tour 2006, defendió la inocencia de su compatriota. «Si en alguien tengo que confiar es en él, porque he trabajado con él. Mientras nadie demuestre lo contrario, le tengo que creer porque quiero y lo deseo, y por el bien de nuestro deporte en España».
El gallego, que se bajó de la bicicleta en el pasado Criterium Internacional de Valencia, pidió que la gente que ha atacado al ciclista de Pinto «lo pueda pagar» cuando se demuestre su inocencia.
No obstante, argumentó que el problema es a nivel mundial, porque se han dado más casos positivos «de los que deberían y a la mínima que hay no se perdona».
Pereiro no cree que la organización de la ronda tenga nada contra el ciclismo nacional. «Simplemente que en los últimos cinco años los españoles hemos ganado y eso no gusta, pero no creo eso de que Francia no nos quiere».
