La invasión ilegal, genocida e injusta que Putin están realizando en Ucrania tenía el objetivo claro de romper a Europa, y con ello la geopolítica económica del planeta, imponiendo el imperio del gas ruso y al modo zar ruso, anexionar territorio imitando cruzadas imperialistas belicistas, del pasado. Pero ha errado en su estrategia, ya que lo que ha conseguido ha sido el efecto contrario, hacer más Europa, unir de forma rápida a los socios europeos en contra de esta sin razón, que aflore el movimiento de solidaridad y ayuda al pueblo ucraniano en su cruzada contra las bombas asesinas, que lamentablemente ya dejan muchas víctimas civiles inocentes. Queda mucho trabajo ante una situación tremendamente complicada, por la situación de dificultades en el precio de la energía, en la inflación y en la situación económica, por eso estoy convencido que haremos más Europa para conseguir encontrar soluciones. La visita de la presidenta de la Comisión Úrsula Von der Leyen de la semana pasada, demuestra la buena sintonía y peso del presidente Sánchez en las decisiones europeas, a pesar de los ‘poetas del apocalipsis’.
En nuestro país, vemos como los aliados ideológicos de Putin, la ultraderecha de Vox, actúa con cobardía ya que no verbaliza con claridad su apoyo al dictador de un partido conservador nacionalista (por mucho que la propaganda ultra lo intente, no es comunista, es uno de los suyos), pero veta declaraciones en instituciones en contra de la invasión del sátrapa y calla sus atrocidades, para no apoyar al Gobierno y la UE.
El ejemplo de las mordidas del hermano de la Presidenta de la Comunidad de Madrid es evidente
También observo como para algunos, la ‘ridícula degradación ciudadana’ sirve para amparar la corrupción de la derecha con soflamas contra el comunismo y sus representantes. El ejemplo de las mordidas del hermano de la Presidenta de la Comunidad de Madrid es evidente, ya que pone una vez más la corrupción del PP como centro de sus hostilidades internas y foco ciudadano. Aprovecho para alertar de que no tardaremos mucho en volver a ver la lucha intestina del poder entre Ayuso y ahora Feijoo. Pueden consultar mi columna después de las elecciones en Madrid, cuando vaticiné la bronca Casado-Ayuso. Tienen un claro problema.
Vivimos en una economía de mercado, por lo tanto, en un sistema socioeconómico no comunista, que aposto claramente por el estado de bienestar por la lucha de la clase trabajadora y los partidos de izquierda, es decir, los manipuladores que intentan tergiversar la realidad con noticias falsas no merecen más atención. Los esfuerzos deben ser para asentar nuestro modelo de servicios públicos de calidad ante la ola neoconservadora populista que intenta su privatización para sacar tajada y que aumente la desigualdad. Aquí Europa es fundamental.
La prueba del algodón la veremos el jueves en la sesión constitutiva de las Cortes de Castilla y León
No deja de sorprender que el PP, abierto a canal por sus luchas intestinas y su corrupción intenten dar lecciones, salvo que el cambio de liderazgo lo hagan para que todo siga igual, sin arrimar el hombro y cada día perdiendo votos hacia la ultraderecha. La prueba del algodón la veremos el jueves en la sesión constitutiva de las Cortes de Castilla y León, cuando las reuniones secretas de esto día den como fruto su pacto con Vox. En esto serán los primeros populares europeos en dejar que la ultraderecha toque poder en las instituciones, con el amparo de Mañueco y de Feijoo, ya saben esos lideres tan centrados y progresistas. En esto también poco creen en Europa.
(*) Diputado del PSOE por Segovia.
