Hasta este fin de semana han sido 334 los usuarios de residencias de ancianos o personas con discapacidad que han sido derivados a hospitales para ser atendidos desde que el 14 de marzo se declaró el Estado de Alarma por el coronavirus.
Así se desprende de los datos facilitados por la Consejería de Sanidad, que detalló que en este tiempo han sido 3.595 las personas en toca la Comunidad que, estando en residencias, públicas o privadas, fueron trasladadas a hospitales. En el caso de Ávila fueron 254 los usuarios de residencias evacuados; en Burgos 490; con 698 figura León; 274 en Palencia, 511 en Salamanca; 334 en Segovia, 212 en Soria, 576 en Valladolid y 246 en la provincia de Zamora. La media de edad de los derivados desde las residencias ha sido de 88 años.
Con estos datos se completa, pero no aclara, la polémica en torno a si en algún caso se evitó trasladar a ancianos a centros hospitalarios, bien por prescripción facultativa, o bien por cuestiones de capacidad de los centros hospitalarios en el pico de la epidemia. Lo cierto es que hubo momentos puntuales en algunos casos, como el del Hospital de Segovia, en que tanto las instalaciones como el personal estuvo al borde del colapso, por lo cual se estuvieron solicitando refuerzos.
Las investigaciones continúan abiertas en algunos juzgados en los que se han presentado denuncias para aclarar la gestión por el fallecimiento de internos en residencias. Según la Junta en la provincia de Segovia han fallecido en estos centros 187 personas y 196 con síntomas compatibles.
