La tarjeta Buscyl ha alcanzado un notable éxito de implantación en Segovia, situando a la provincia entre las que más usuarios han adoptado este sistema de transporte público gratuito en Castilla y León, solo por detrás de Valladolid y Salamanca. Más de 22.000 segovianos ya han solicitado la tarjeta, reflejando la rápida aceptación de esta iniciativa y su utilidad social.
El perfil mayoritario de los solicitantes en la provincia está compuesto por personas mayores, que suman 18.300 usuarios, junto a 4.100 menores de 15 años. Esta distribución evidencia que la tarjeta no solo facilita la movilidad cotidiana de los mayores, sino que también apoya a las familias y fomenta la participación de los jóvenes en la red de transporte autonómico.
Eficiencia en la gestión
Cuatro de cada cinco solicitantes ya han recibido su tarjeta Buscyl, lo que confirma la agilidad del proceso y la buena acogida del sistema. En toda Castilla y León, son ya 370.000 los ciudadanos con tarjeta QR, con especial incidencia en provincias con transporte metropolitano como Burgos, León, Salamanca, Segovia y Valladolid.
El trámite para obtener la tarjeta es sencillo y totalmente digital: basta con disponer del DNI y el empadronamiento, que se verifica automáticamente con el Instituto Nacional de Estadística. En apenas cinco días hábiles, los usuarios reciben su código QR por correo electrónico, listo para ser utilizado en cualquier autobús de la red autonómica. Para quienes no cuentan con correo electrónico, el código QR se envía en formato papel por correo postal, garantizando la inclusión de todos los ciudadanos.
El código QR funciona como identificador personal de transporte y puede enseñarse directamente en el móvil, en formato impreso o en el documento enviado por la Junta. Los conductores cuentan con PDA o lectores móviles que permiten validar el viaje de manera inmediata, asegurando rapidez y fiabilidad en la operación. Aunque en el futuro no se descarta el uso de tarjetas físicas, el formato QR garantiza comodidad, universalidad y eficiencia, siguiendo la tendencia de otros sectores como la cultura y el comercio.
Mejora continua
La Junta de Castilla y León está instalando lectores de QR en 2.000 autobuses, un proceso de modernización tecnológica que reforzará la red de transporte autonómica. Asimismo, se trabaja con las empresas concesionarias para habilitar la reserva previa de billetes a través de Buscyl, una de las principales demandas de los usuarios.
El incremento de viajeros ha tenido un efecto directo en la programación de servicios. En algunas líneas, especialmente las de Salamanca, el uso de la tarjeta ha impulsado la demanda y la Junta ha respondido con refuerzos puntuales, demostrando capacidad de adaptación y atención a las necesidades reales de los ciudadanos.
Un modelo más accesible y social
La tarjeta Buscyl contribuye a un transporte más inclusivo, sostenible y moderno, acercando la movilidad pública a todos los colectivos, con especial atención a mayores y jóvenes. La iniciativa refleja el compromiso de la Junta por situar a Castilla y León a la vanguardia de los sistemas de transporte en España y promover la cohesión territorial, la igualdad de oportunidades y la sostenibilidad medioambiental.
Además, la implantación del sistema ha permitido aliviar la carga económica de muchas familias y de personas mayores, quienes tradicionalmente dependen del transporte público para su movilidad diaria. La gratuidad del servicio favorece también la reducción del uso del vehículo privado y potencia un modelo de transporte más ecológico y eficiente.
El sistema continúa en fase de expansión y mejora. Se prevé completar la instalación de los lectores en todas las rutas metropolitanas e interurbanas de la Comunidad, y la incorporación de nuevas funcionalidades, como la reserva de plazas, permitirá optimizar la experiencia de los usuarios. La Junta también mantiene el compromiso de garantizar que todos los ciudadanos, independientemente de sus recursos digitales, puedan acceder a la tarjeta y beneficiarse del transporte gratuito.
Sanz Merino: “La tarjeta Buscyl abre la puerta a una etapa de modernización en la gestión pública”
El consejero de Movilidad de la Junta de Castilla y León, José Luis Sanz Merino, destacó la tarjeta digital Buscyl como un instrumento que combina innovación tecnológica y beneficio social para los ciudadanos.
“Con la tarjeta digital Buscyl no solo garantizamos la gratuidad del transporte, sino que abrimos la puerta a una nueva etapa de modernización en la gestión pública. La Junta de Castilla y León demuestra que puede ser pionera en soluciones digitales útiles para todos”, afirmó Sanz Merino.
El consejero subrayó que la iniciativa tiene un impacto directo en la calidad de vida y en la economía familiar, “ya que se trata de una política real que mejora la calidad de vida de las personas, al tiempo que facilita el ahorro a las familias, contribuye a la lucha contra la despoblación, favorece la cohesión territorial y supone un avance en sostenibilidad ambiental”, indicó.
Además, enfatizó la dimensión social y la igualdad de oportunidades que ofrece la tarjeta. “Estamos hablando además de un derecho que garantiza la igualdad de oportunidades, porque con la tarjeta Buscyl ningún ciudadano de Castilla y León tiene que renunciar a desplazarse por motivos económicos”, añadió.
Sanz Merino destacó también que la modernización incluye la instalación de lectores de QR en más de 2.000 autobuses, así como la futura implementación de reservas previas de billetes, medidas que buscan mejorar la experiencia de los usuarios y reforzar el compromiso de la Junta con un transporte público accesible, sostenible y adaptado a las necesidades de la población.
