Los representantes políticos electos y el futuro gobierno castellano leonés, tienen la prioritaria obligación de hacer frente a los problemas más urgentes de sus habitantes, entre los que se encuentran los relativos a los diferentes servicios públicos que conforman el raquítico estado del Bienestar en permanente mengua. En España muchos de los derechos constitucionales que lo sustentan están siendo sistemáticamente incumplidos. En concreto el artículo 47.2 referido a la sanidad pública cuya responsabilidad de organización y tutela corresponde a los poderes del Estado.
La MEDSAPSG quiere poner sobre la mesa aquellos aspectos irrenunciables sobre los que es preciso y urgente intervenir, muchos de los cuales fueron objeto de compromisos por algunos partidos, si queremos preservar el carácter público, universal y de calidad de nuestra sanidad pública.
– Sanidad pública universal.
Deber ser defendida sin excluir a nadie por su situación legal, ni ninguna otra circunstancia (inmigrantes en proceso de reagrupación etc.). Esto debe hacerse efectivo evitando las trabas burocráticas que la limitan (p. ej. Empadronamientos).
– Atención primaria.
Exigimos compromisos para que se revierta su deterioro continuado máxime cuando la dispersión y el envejecimiento son características que exigen respuestas específicas. En primer lugar sin un aumento del presupuesto en atención primaria esto es de todo punto inviable. PSOE y Podemos se comprometieron a aumentar la inversión en At. Primaria hasta del 25% del presupuesto total sanitario.Desinvertir aquí tiene consecuencias nefastas para la calidad de la salud individual y colectiva. Prevención e intervención temprana son claves para evitar el deterioro de la salud y también el aumento del gasto en recursos de urgencias y hospitalarios. Las enfermedades crónicas propias de colectivos de avanzada edad, exigen cuidados y atenciones de proximidad propios de la atención primaria. Hay que racionalizar la atención médica en los núcleos rurales, teniendo en cuenta sus necesidades estacionales, las distancias entre núcleos y los recursos humanos que son necesarios, sin llevar a los profesionales hasta extremos de tensión y cansancio que les impidan realizar bien su trabajo.
– Listas de espera, conciertos y derivaciones.
Partimos de la falta de credibilidad de los datos de listas de espera que ofrece la administración.No es de recibo que se derive a la sanidad privada intervenciones de poca complejidad a costa del dinero de todos, cuando no están justificadas. Lo mismo en casos de concierto con la sanidad privada (las llamadas “externalizaciones”), o sea privatizaciones parciales encubiertas. La administración tiene la obligación de gestionar correctamente oferta y demanda: Aumentando el número de profesionales (convocatorias de MIR suficientes) con unas condiciones de trabajo dignas, no son de recibo contrataciones por días o semanas, ni la falta de sustituciones en casos de enfermedad, vacaciones,etc.; aumentando los horarios de atención, mañana y tarde; empleando todos los medios técnicos de que dispone la sanidad pública infrautilizados por falta de personal cualificado (radiólogos,etc.).Debido al deterioro progresivo de la Sanidad Pública, muchas personas optan por un seguro privado, proporcionando un nicho de negocio cautivo a costa de un sistema público de todos y que debería ser mantenido por todos (si nuestro sistema tributario fuera proporcional y suficiente como debiera).
– Complejo hospitalario y camas sanitarias.
Segovia es la única provincia que cuenta con un solo hospital y no con dos como el resto. El número de camas por habitante es sensiblemente inferior (la media de camas por mil habitantes es en Castilla León de 3,90 y en la provincia de Segovia de 2,32). La falta de camas para estancias cortas y medias obliga a que muchos pacientes sean dados de alta prematuramente para que sea la propia familia la que se haga cargo de ellos (en el domicilio o en una Residencia). La adaptación del hospital policlínico para estancias medias aumentaría sustancialmente la capacidad del sistema para atender a los pacientes crónicos. Esta decisión es urgente e inaplazable.
– Participación de los colectivos profesionales y ciudadanos en la discusión y toma de decisiones.
Exigimos que se escuche y tengan en cuenta las críticas y aportaciones constructivas de plataformas de profesiones y de usuarios en las instancias que ya existen o que puedan constituirse a nivel institucional. Estamos convencidos que estas graves decisiones no pueden estar en manos exclusivamente de políticos o de gestores afines.
La MEDSAPSG apoyará las políticas valientes que se atrevan a encarar los problemas de raíz con una clara y tajante línea roja: No a la privatización de la sanidad pública.
No obstante permaneceremos activos y vigilantes, como hasta ahora, porque nos va mucho en ello: nuestra propia salud, la de nuestros descendientes y, en definitiva, la posibilidad de llevar una vida digna de tal nombre hasta el final.