El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ofreció este lunes a los grupos parlamentarios fijar una posición de comunidad ante la próxima reunión de la Conferencia de Presidentes, ante la revisión del sistema de financiación autonómica y para los próximos Presupuestos que pretende presentar en plazo en las Cortes, pero la oposición, que aceptó nuevas reuniones para avanzar, expresó “dudas”, “incógnitas” y advirtió de que no tendrá “un cheque en blanco”.
Fernández Mañueco mantuvo este lunes una ronda de reuniones con los partidos con representación en las Cortes, después de la que celebró en octubre del pasado año, si bien en esta ocasión la situación ha cambiado porque preside un “Gobierno débil en minoría”, como le recordó el socialista Luis Tudanca. Los encuentros terminaron sin avances y con el emplazamiento a nuevas reuniones.
Al término de las reuniones, a las que no acudieron los procuradores del Grupo Mixto Francisco Igea y Pablo Fernández, el consejero portavoz, Carlos Fernández Carriedo, explicó que el presidente ha asumido tres compromisos fijar una posición de comunidad ante la próxima Conferencia de Presidentes, en materia de financiación ante “el impacto” por el pacto de PSC-ERC y sobre los Presupuestos.
Por su parte, Luis Tudanca (PSCyL), Juan García-Gallardo (Vox), Luis Mariano Santos (UPL), Ángel Ceña (Soria Ya) y Pedro José Pascual (Por Ávila) se comprometieron a acudir a cuantas reuniones sean convocados, aunque expresaron “dudas” e “incógnitas” sobre el contenido de la negociación e incluso el exsocio de Fernández Mañueco advirtió de que no le darán “un cheque en blanco”.
Presupuestos
El portavoz y consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, reconoció que no tienen el apoyo parlamentario a las próximas cuentas, cuya elaboración se inició con Vox en la Junta, y expresó el objetivo de llegar a acuerdos, pero también subrayó que mantendrán sus principios.
Luis Tudanca aceptó la oferta del presidente de la Junta de volver a reunirse para hablar de los próximos Presupuestos una vez que estos hayan sido presentados en las Cortes, pero le advirtió que las leyes se deben cumplir.
“Tiene que elegir: o Castilla y León o la extrema derecha, o renuncia a la extrema derecha y recupera la senda del diálogo o no va a encontrar un nuevo socio al que engañar para blanquear a la extrema derecha”, argumentó Tudanca.
Por parte de Vox, su portavoz y expresidente de la Junta, Juan García-Gallardo, recordó a Fernández Mañueco que con los votos obtenidos en las elecciones autonómicas tienen una representación con la que quieren ser “parte sustancial de las propuestas para una eventual negociación” que quiera realizar el Gobierno autonómico con los grupos. En todo caso, y desde una perspectiva de “mano tendida”, García-Gallardo aseguró que acudirán a esa negociación con la Junta “sin líneas rojas de antemano” para poder comunicar allí a su ya exsocio de gobierno sus “condiciones innegociables”.
UPL también mostró sus dudas sobre si la propuesta de mano tendida de Mañueco para la negociación de los Presupuestos Generales de la Comunidad para 2025 es “cosa verdadera o esfuerzo impostado”, desde la perspectiva de que, en opinión de Luis Mariano Santos, “sigue teniendo los mismos apoyos de Vox, de forma más liviana pero más cómoda, porque no les tiene en el Gobierno”.
Más pesimista se mostró el procurador de Soria Ya Ángel Ceña quien expresó su convencimiento de que no habrá Presupuestos para el próximo año aunque la Junta los presente, y mostró la duda de la voluntad negociadora del presidente, Alfonso Fernández Mañueco.
En la misma línea, Pedro José Pascual pidió al presidente que la provincia de Ávila no se mantenga en los nuevos presupuestos como la última en las inversiones de la Junta en sus presupuestos.
