El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha subrayado este viernes que la situación epidemiológica de la covid en la Comunidad está «bajo control«, aunque ha reconocido que esto «no quiere decir que se puedan producir situaciones de tensión».
Así se ha referido en rueda de prensa el presidente autonómico a la situación por la que atraviesa Burgos, por lo que ha hecho un llamamiento a sus habitantes para que limiten sus movimientos «al máximo» y hagan un «confinamiento inteligente y voluntario» consistente en ir «de casa al trabajo» y, si se quiere hacer deporte, «siempre al aire libre».
«No entraremos en especulaciones«. Esa ha sido la respuesta del presidente de la Junta preguntado por si el Ejecutivo autonómico se plantea aplicar más medidas a las ya anunciadas para la ciudad de Burgos, como podría ser el cierre perimetral de la ciudad o de la provincia, algo que sí que podría hacer la Junta con el actual decreto de estado de alarma.
Por otro lado, al igual que la consejera de Sanidad y el portavoz de la Junta, Fernández Mañueco ha reconocido que por el momento se desconoce qué está ocurriendo en Burgos, ya que, mientras que en otras zonas de la Comunidad la pandemia se ha «estabilizado», en esta ciudad ha continuado creciendo en los últimos días.
Todo ello ha llevado a la Junta a decretar este viernes nuevas restricciones en la ciudad, que pasarán por limitar las reuniones de no convivientes a un máximo de tres personas, reducir los aforos en espacios cerrados o realizar test masivos de antígenos y análisis de aguas residuales, además de otras medidas ya existentes.
«Son decisiones acertadas, necesarias y valientes» que tendrán «efectos beneficiosos en el tiempo», ha expresado Fernández Mañueco, quien ha considerado, no obstante, que ante la situación «excepcional» que se da en Burgos se requiere «ir más allá», de modo que ayer solicitaron a la Secretaría de Estado de Sanidad, en una reunión, poder contar con una herramienta jurídica que permitiera el confinamiento domiciliario en Burgos.
Ante la negativa del Gobierno a conceder esta herramienta, el presidente de la Junta ha reconocido que él es un hombre «con bastante paciencia», pero la cuestión «no es tener paciencia, sino contar con esa herramienta desde ya o llegaremos tarde», ha expresado.
Finalmente, preguntado por las palabras del director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias del Ministerio de Sanidad, Fernando Simón, en las que aseguró que Castilla y León aún tenía margen para aplicar medidas con efectos similares al confinamiento domiciliario, Fernández Mañueco ha apostillado que es Simón quien debe decir cuáles son esas medidas.
