Próximamente se celebrará el día del ayuno voluntario organizado por Manos Unidas. Manos Unidas es una asociación eclesial y una ONG que trabaja fundamentalmente en ayuda del tercer mundo con el objeto de erradicar la pobreza cumpliendo los objetivos del milenio.
Manos Unidas tiene en Segovia un largo historial de promoción de la justicia y el bienestar apoyando diversos programas de desarrollo con la ayuda de numerosos segovianos que aportan sus donativos a través de las colectas, cuentas bancarias y de forma individualizada. Un grupo de personas de forma desinteresada y voluntaria regala su tiempo en esta tarea humanitaria.
Uno de los grandes problemas con los que Manos Unidas se encuentra en la situación actual es lo que se denomina “cronificación de la pobreza”. El primer informe del Observatorio social de La Caixa en el área de Desigualdad lleva por título ‘Radiografía de medio siglo de desigualdad en España’. Describe las características que explican que España es uno de los países más desiguales de Europa. En lugar de analizar factores relacionados con el capital social y los valores, se centra en las rentas e ingresos de los ciudadanos.
Las diferencias entre rentas crecen más durante las recesiones económicas de lo que se reducen durante las expansiones. Atendiendo a la crisis del 2008 y la que está provocando la pandemia, los autores señalan que vivimos en el país de la UE donde más aumentaron las diferencias entre las rentas más altas y las más bajas. Es preocupante que el grupo de población con rentas medias se está reduciendo: aumenta el número de pobres, cada vez más pobres, y disminuye el número de ricos, cada vez más ricos.
Hay algo alarmante: en la última década la pobreza se ha vuelto crónica. Hasta finales del siglo pasado y principios del actual no era crónica, sino transitoria: hasta entonces muchos pobres pudieron recuperarse, sin embargo hoy el que baja al umbral de la pobreza difícilmente sale de él y debe contentarse con las migajas que desparrama papá Estado o que provienen de las instituciones de beneficencia. Aunque hubiera siempre un porcentaje de población en situación de pobreza, la movilidad social y las posibilidades de que el número de hogares transitara desde la parte baja de la tabla a la parte media, era elevado. Es algo que coloquialmente se llama ‘ascensor social’ y que los analistas vinculan con el dinamismo de las clases medias.
Esta cronificación que oscila en torno al 15%, está relacionada con las políticas familiares y las políticas sociales. Se ha demostrado que cuanto mayor es la duración del desempleo y la pobreza, más difícil es revertir la situación. El problema tiene dimensiones intergeneracionales porque consolida la alta dependencia de las rentas de los progenitores y una menor movilidad en los estratos de bajo nivel socioeconómico, es decir, en muchos casos los jóvenes viven del ahorro de los padres. Es una cronificación que afecta a los hogares más jóvenes y con menores dependientes. Como señalan los autores ‘durante los últimos quince años se ha duplicado el porcentaje de niños que viven en un hogar en el que ninguno de los miembros activos está empleado’. Además, la pandemia ha mostrado la rapidez con la que se han incrementado los hogares que viven al día y con muchas dificultades para afrontar los gastos imprevistos.
Los autores proponen modificar la distribución de rentas, aumentar los impuestos y extender protecciones no contributivas. Esperemos que en próximos trabajos muestren que esta cronificación también esta relacionada con la inseguridad jurídica, la ineficiencia de las administraciones, la ausencia de cultura política común y la desmoralización de los agentes educativos.
Manos Unidas se esfuerza por incidir en el tercer mundo potenciando y promoviendo los servicios y a los agentes educativos, fomentando una cultura política que busque el bien común de todos los ciudadanos, dando vitalidad a unas administraciones que suelen ser inactivas entre los pueblos en vías de desarrollo e interviniendo en el fomento de una seguridad jurídica cada vez más intensa. “Más de 60 años” trabajando por un mundo más justo, contagiando solidaridad, realizando en la actualidad proyectos contra el coronavirus y cambiando vidas en positivo.
(*) Catedrático emérito.
