Unión Progreso y Democracia, UPyD, se enfrenta en las últimas semanas a una complicada situación. Tras los malos resultados conseguidos en las elecciones andaluzas, muchos de sus dirigentes y candidatos a las próximas elecciones regionales y municipales han dejado el partido y algunos, incluso, se han afiliado a otros grupos, como Ciudadanos. Tras todo ello, el grupo dirigido por Rosa Díez ha presentado un nuevo equipo con el que espera llegar, por lo menos, al congreso de junio, en el que se tendrán que plantear muchas decisiones, como el diálogo con otros partidos, principal motivo de discordia interno.
Sobre esta situación, la candidata de UPyD a la Alcaldía de Segovia, Luciana Miguel, afirma que “hay que reconocer que es preocupante, pero es una reaccción normal después de lo que las urnas nos han dicho en Andalucía”. Sin embargo, añade que “nuestro proyecto salió hace siete años y era innovador, poniendo de manifiesto los defectos de nuestra democracia que deberían subsanarse y ese fue el fin del bipartidismo. Somos el mejor proyecto y lo pensaba antes y lo defiendo ahora y creo que España lo necesita”.
Aún así, reconoce que “algo hemos hecho mal, porque España no lo sabe reconocer y el proceso de autocritica forma parte del proceso normal de análisis interno” y puntualiza que, “a nivel nacional, ha habido problemas de comunicación interna, con los medios de comunicación…”, temas que habrá que estudiar para sobreponerse a esta crisis de partido.
Para Miguel, “nos hemos equivocado también en cuestiones de estrategia, el momento político ha cambiado desde que empezamos y la sociedad demanda una regeneración democrática y que seamos capaces de llegar a acuerdos. Hemos pecado de poca flexibilidad y de poco diálogo con otros partidos, como Ciudadanos”.
Y es que la candidata segoviana sí es partidaria de mantener diálogos con otras formaciones, aunque reconoce que su partido es democrático, por lo que ella acata lo que ha decidido la mayoría, aunque en el congreso de junio expondrá su opinión a favor de las conversaciones con otrs formaciones con los que UPyD puede tener aspectos en común.
Respecto a la situación del grupo en Segovia, considera que UPyD “se ha ganado el respeto de los ciudadanos, somos un grupo de gente que ha crecido en los cuatro años que llevamos en Segovia, donde contamos con unos cien afiliados y simpatizantes, candidaturas en 19 municipios, y tenemos una comunicación directa con la gente…”.
Además, cree que “la gente es perfectamente consciente de que nuestra actividad no es sencilla, porque decimos cosas que los políticos de toda la vida no querían oír y hemos enseñado que no es una forma de entender la política, sino de practicarla, de aquellos que defienden los intereses de uno mismo y del partido en lugar de estar del lado de los ciudadanos”.
“También hemos hablado de temas que son importantes, como la falta de diligencia para sacar adelante el PEAHIS o el riesgo de la protección de determinadas áreas, como la casa de San Marcos o la Vera Cruz, que hace dos años se dijo que era urbanizable”, añade Miguel, por lo que espera que todo ello sea tenido en cuenta por los segovianos en las próximas elecciones, ya que “tenemos el respeto y nos falta ver si hemos conseguido su confianza”, a lo que añade que “las expectativas son buenas” de cara a los resultados de los comicios del 24 de mayo.