Los trabajadores de la empresa pública estatal Tragsa en Castilla y León afrontan “con más ánimo” las movilizaciones contra el ERE que la compañía dio por concluido ayer tras ejecutarse más de 550 despidos en toda España y 70 en la Comunidad, ya que intuyen “presiones” a la compañía por parte del Gobierno de la que depende. Así lo señaló la responsable de Comisiones Obreras (CCOO) en Tragsa, Berta Fernández, la cual tomó el anuncio del Grupo de dar por finalizado el expediente sin haber llevado a cabo los más de 1.300 previstos inicialmente como una prueba de esta idea.
Por parte del Comité de Empresa, Antonio Lozano insistió en que las movilizaciones continuarán para conseguir que se reviertan los despidos ya consumados. En este sentido, indicó que los trabajadores continúan con el encierro que desde el pasado 31 de diciembre mantienen en las instalaciones de Tragsa en Valladolid, aunque se impide el acceso al edificio a los ya despedidos. Además, respaldaron las jornadas de huelga previstas para los días 26 de enero y 3 de febrero, en los que se celebrarán también manifestaciones frente a las puertas de la sede del PP en Madrid.
Por otro lado, Lozano reiteró que el objetivo de Tragsa ha sido cambiar a empleados fijos por eventuales, ya que “se mantiene la carga de trabajo”, al hilo de lo cual puso como ejemplo el caso de Asturias, donde “ya se ha empezado a contratar de forma temporal a veterinarios a los que se había despedido”. Dentro de esta “apuesta por la precariedad”, los trabajadores recordaron que antes de aplicarse el ERE, la empresa “ya contaba con un 40 por ciento de eventuales”, por lo que no entienden la necesidad de ampliar este porcentaje y reducir el de fijos.
Para terminar, Antonio Lozano lamentó que a pesar de que a nivel de Castilla y León “Tragsa siempre ha dado beneficios”, se hayan producido esta serie de despidos en la Comunidad.
Por su parte, UGT también denunció la situación “escandalosa” en Tragsatec después de conocer las nuevas ofertas de empleo de la compañía. De esta forma, UGT señaló que dichas ofertas de empleo, publicadas el mismo día en que la empresa pública anuncia el fin del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de 1.336 trabajadores tras ejecutar 555 despidos, implican contratos eventuales y una reducción “sustancial” de las condiciones de trabajo.
Por su parte, el grupo Tragsa aclaró que el proceso de selección que aparece en la web de búsqueda de empleo Infojobs es de carácter temporal para culminar tareas de la Administración y afrontar futuros trabajos, al tiempo que precisó que dichas ofertas no tienen nada que ver con los últimos despidos.
Así, desde FeS-UGT denunciaron el “escándalo” de que una empresa pública haya utilizado el procedimiento de despido colectivo para reducir empleo fijo y rebajar las condiciones laborales y salariales de los trabajadores de Tragsatec, donde las nuevas contrataciones, según el sindicato, se hacen fuera del convenio sectorial de ingenierías. Finalmente, solicitaron que los responsables tomen medidas y se tenga en cuenta a los empleados.
