La huelga de caracter indefinido que mantienen los trabajadores de la empresa de transporte sanitario de Segovia Servicio Asistido Urgente (SAU) ha empezado a tener efectos en los usuarios del servicio y en los propios trabajadores.
Los trabajadores que reivindican el pago regularizado de sus retribuciones y reclaman con urgencia que se les ingrese las dos nóminas que la empresa les adeuda, endurecieron ayer las acciones de protesta y retrasaron la salida de los viajes de regreso de los pacientes de rehabilitación y consultas programadas del Hospital General. Coincidiendo con la segunda jornada de huelga, un amplio grupo de trabajadores se concentró las inmediaciones del complejo hospitalario tras dejar a los pacientes en el interior del centro. Allí permanecieron durante cerca de tres horas, de 10.00 horas a 13.00 h, posponiendo los traslados programados que habitualmente hacen en esta franja horaria. “No hemos abandonado a ningún enfermo, todos estaban atendidos en el hospital y nuestra acción no ha afectado a las urgencias”, ha precisado José Andrés Orejana, de la Federación de Servicios a la Ciudadanía de CCOO en Segovia, precisando que no han incumplido los servicios mínimos “abusivos que nos han impuesto”.
La situación no agradó a algunos pacientes que se buscaron transportes alternativos y tampoco a compañeros del servicio que intentaron cubrir los viajes programados. Los piquetes de los huelguistas “retuvieron de forma pacífica a cinco ambulancias que trasladaban a pacientes a sus domicilios”, según ha precisado la Gerencia de Salud puntualizando que los hechos han tenido lugar entre las 11.00h y las 11.25 horas. En este tiempo se vivieron momentos de tensión y enfrentamiento entre un conductor de servicio y un grupo de manifestantes, hasta que finalmente intervino una dotación de la Policía Nacional para disolver el piquete.
