Por fin llegan las tan esperadas vacaciones de verano, esos días que se van reservando y planificando meses antes, aunque hay quienes esa misma noche deciden su destino y el tiempo de su estancia.
Aquellas horas, minutos y segundos que se aprovechan al máximo, en los que las preocupaciones, el agobio y el estrés son enemigos íntimos de la felicidad que produce escuchar el sonido del mar al despertar, o los sonidos de la naturaleza cuando todo está oscuro. Después de esa tormenta protagonizada por quebraderos de cabeza y presupuestos ajustados, llega ese placer y disfrute que acompaña a una calma necesaria tras un año de duro trabajo.
Pero, ¿cuál es el destino preferido por los segovianos? Según datos facilitados por algunas agencias de viajes, estos habitantes deciden migrar a la costa levantina donde el sol y el buen tiempo están asegurados, aunque hay quien opta por otros destinos, generalmente dentro del país
El triunfo de la comodidad de los hoteles para todo tipo de bolsillos es la opción más reconocida por los segovianos deseosos de reposo. Aunque apartamentos, casas rurales o el acogedor bungalow no son estancias que estos habitantes descarten. Da igual la edad, el sexo o el presupuesto, el calor de esta costa es irresistible tras el duro invierno segoviano.
