El IPC provincial descendió dos puntos porcentuales el mes pasado en relación con diciembre, según el Instituto Nacional de Estadística, lo que supone una caída más acusada que la media nacional (-1,6 por ciento) y también a la de Castilla y León (-1,8 por ciento).
La variación anual fue de 1,8 por ciento en Segovia, idéntica a la de la Comunidad Autónoma pero también indica una caída superior a la media nacional (-1,3).
En relación con diciembre en enero subieron los precios de los utensilios de algunos servicios al consumidor (2,9 por ciento), cocina y menaje (2,4), artículos de uso personal (1,9) y los seguros (1,2). Por debajo del 1 por ciento, pero también con incrementos se situaron la conservación de la vivienda (0,5), otros servicios relacionados con la vivienda (0,3) y los alimentos (0,1).
Por el contrario, los precios descendieron de forma destacada en el vestido (-18,6 por ciento) y el calzado (-12,6), así como en artículos textiles del hogar (-6,7), debido a la temporada de rebajas de invierno.
Otros descensos destacados los registraron los hoteles (-9 por ciento), bienes y servicios relativos a los vehículos (-6 por ciento) y los viajes organizados (-7,9).
En cuanto a la variación anual —en relación con enero de 2014— destaca el descenso de los bienes y servicios relativos a los vehículos (-14,1 por ciento), los equipos y soportes audiovisuales, fotográficos e informáticos (-8,3), y los precios de la energía (electricidad, gas y otros combustibles), con una caída del 4,6 por ciento.
Aunque en conjunto este grupo no ha experimentado grandes variaciones mensuales en sus cotizaciones, destaca la subida del 2,1 por ciento del precio del pescado fresco —en Castilla y León, ya que el INE no ofrece datos por provincias— y del 1,4 por ciento en las patatas. Por el contrario se registró una reducción en los precios al consumo de la carne de ovino (-3,6 por ciento), las frutas frescas (-3,1) y el azúcar (-2,3). En cuanto a la variación anual, la carne de porcino ha protagonizado el mayor descenso en el IPC (-4,6 por ciento). La principal subida la experimentó otra carne, la de vacuno, del 7 por ciento.
Desde la organización de autónomos de UGT, Uptacyl, alertan de que el IPC está en negativo desde el pasado mes de julio y, además de la caída de precios del petróleo, consideran que se debe al estancamiento y freno del consumo, por lo que señalan que podría perjudicar a la recuperación económica.
Por su parte, desde FUNCAS, la Fundación de las Cajas de Ahorro, indica que la caída de precios se debe a los componentes más volátiles, energía y alimentos, mientras que en el resto se han elevado, a nivel nacional. Así, su previsión anual para el IPC se eleva desde -1,2 por ciento hasta -0,7 por ciento.
