Cerca de 12.000 personas asistieron ayer por la tarde a los juegos de agua de las fuentes de los jardines del Palacio de la Granja de San Ildefonso, según las primeras estimaciones de Patrimonio Nacional, convirtiendo el día de San Luis en una de las jornadas más especiales de las fiestas patronales del Real Sitio.
Minutos antes del comienzo de los juegos de agua, las inmediaciones del Palacio y el acceso a los jardines se convirtieron en lugar de encuentro para vecinos y peñistas, que apuran los últimos actos de las fiestas, y para miles de turistas venidos de muchas partes de España. Para los granjeños, se trata de un día señalado en su calendario, que viven con intensidad desde pequeños, mientras que para el conjunto de los visitantes es una magnífica oportunidad de disfrutar de forma gratuita de uno de los conjuntos escultóricos de estilo rococó mejor conservados.
Está formado por ocho grupos de fuentes en excelente estado de conservación, que recrean diferentes escenas mitológicas. Esculturas de mármol y plomo barnizado, imitando al bronce rojizo y con pequeños toques dorados, que parecen convertirse en seres animados con el rumor del agua.
El recorrido comenzó en ‘La Carrera de Caballos’ y la ‘Cascada nueva’, las dos fuentes que se sitúan en la zona de jardín más próxima al Palacio, edificio mandado construir por Felipe V como un proyecto personal, que comenzó en 1718. De ahí, se llegó a ‘Los vientos’, para lo que es necesario desplazarse unos metros, ganado desnivel. Y es el funcionamiento de las fuentes se basa en los planteamientos físicos y matemáticos de Arquímedes y en el principio de vasos comunicantes de Pascal, lo que hace que la fuerza del agua proveniente del estanque de El Mar pase de una fuente a otra sin necesidad de bombeo.
LA MAGIA DEL AGUA
La explosión festiva llegó en ‘El Canastillo’, en la que la fuerza del agua empapó a los asistentes hasta cuatro veces, desatando la euforia y los aplausos. Calados pero con una amplia sonrisa, miles de personas siguieron el recorrido por el trazado original del arquitecto francés René Carlier, pasando de una fuente a otra y redescubriendo la obra escultórica de René Fremin, Jean Thierry y Jacques Bousseau.
Tres arquitectos que dirigieron a un equipo de artistas franceses, que habían trabajado en los palacios de Luis XIV, y que crearon a los pies de la Sierra de Guadarrama un jardín al estilo francés de la época, considerado por muchos como “un Versalles en miniatura”.
Así, se llegó a ‘Las Ocho calles’ ‘La Tona’ (también conocida como ‘Las Ranas’, ‘Los baños de Diana’ y ‘La Fama’, en la que el chorro que alcanza los 40 metros de altura dejó boquiabiertos a los que asistían por primera vez.
Los juegos de agua tradicionalmente se celebran el día de San Fernando (30 de mayo), Santiago Apóstol (25 de julio) y San Luis, (25 de agosto). Además, dependiendo de la disponibilidad de agua, se programan otros encendidos durante los meses de verano.
